Cuando nace la CORED, (Coalición para la Restauración de un Estado Democrático) en Guinea Ecuatorial y, su presentación oficial el 28 de Enero de 2014, en París (Francia), fue para sumarse a la lucha que los demócratas están llevando desde hace décadas contra las sucesivas dictaduras implantadas en nuestro país, ayer Macías, hoy Teodoro Obiang Nguema.

La aparición de la CORED en el escenario político guineano supone un nuevo impulso a esa desigual lucha con un nuevo discurso y unos planteamientos que están suscitando el interés de muchas personas ya sea a nivel nacional como internacional. La CORED no se presenta como la varita mágica que va acabar con la dictadura sino como una fuerza política con una visión mucho más amplia de la situación en que se encuentra actualmente nuestro país tras 35 años de dictadura y más de 20 años del llamado “ensayo democrático”.

El objetivo de cualquier partido político es alcanzar el poder y la CORED no es ninguna excepción. Dicho objetivo sólo es justificado si se hace por vía democrática, es decir a través de elecciones democráticas, libres y transparentes, y es por eso que la CORED aboga por un cambio no violento en Guinea Ecuatorial. Cualquier intento de acusar a la CORED de acciones “desestabilizadoras” del país carece de fundamento, tratándose simplemente de maniobras de distracción y de engaño al pueblo.

La CORED en ninguno de sus declaraciones ha excluido a nadie en este esfuerzo por conseguir la apertura de un proceso de transición política que permita la participación de todos sin exclusión de ninguna clase. En lo que sí no está de acuerdo la CORED es, que dicho proceso sea liderado por el régimen actual en la persona de Teodoro Obiang Nguema, razón por la que exigimos como condición para que este proceso sea creíble que éste debe dimitir y que la transición sea capitaneada por el pueblo en su conjunto. Con la experiencia de los más de 20 años de “ensayo democrático” del que Obiang ha sido el Árbitro y Moderador, sería a nuestro juicio un suicidio político volver a confiarle este papel. Este es el discurso de la CORED y no lo que se le quiere atribuir interesadamente.

La CORED también es de la opinión de que la “unión hace la fuerza” pero dicha unión no se puede forzar cuando los objetivos de las partes son contrapuestos. Las condiciones que los firmantes del Manifiesto de Madrid del 22 de marzo de 2014, han presentado para el Diálogo Nacional, son a opinión de la CORED insuficientes y ambiguas siempre que aun sin decirlo, parece que dan más protagonismo a Teodoro Obiang Nguema en ese hipotético diálogo lo que le permite a ganar tiempo para su plan de sucesión. El Diálogo Nacional en su diseño actual sólo da ventaja a Obiang a quien algunos siguen considerando “maestro de la orquesta” y es lo que no acepta la CORED y lo que constituye el punto de desencuentro entre las partes.

En las declaraciones del mismo Secretario General de CPDS y el comunicado de su representante en España, ha quedado bien claro para la CORED que el propósito del dialogo nacional es de negociar para ir ganando espacios en la dictadura. La CORED está convencida de que ante la situación catastrófica en que se encuentra el país al borde de la desestabilización tanto social como política, el país necesita urgentemente un cambio político, una verdadera transición que conduzca a la democracia, pero dada la experiencia con el régimen, esto no se puede conseguir con Obiang al frente, por eso afirmamos que no participaremos a un dialogo para no cambiar nada, por eso condenamos toda iniciativa que solo pueda servir para seguir prolongando el sufrimiento del pueblo de Guinea Ecuatorial como parece ser a todas luces, el proyecto de diálogo nacional presentado por su máximo exponente es decir, CPDS.

En un tema de vital importancia para el futuro de nuestro país, no se puede ir con medias verdades. Los que lideran el Manifiesto de Madrid reprochan a la CORED de exigir la dimisión de Obiang como condición para iniciar un proceso de transición creíble en Guinea Ecuatorial y se preguntan ¿dónde se ha hecho? Contestamos que la CORED no actúa porque en tal o cual sitio se hizo o se dejó de hacer tal cosa sino en base a nuestras convicciones políticas porque no queremos participar en un proyecto que al final va a suponer una traición a las aspiraciones democratizadoras del pueblo guineano.

A título recordatorio, del 10 de Febrero al 16 de Marzo de 1993, se reunieron en Malabo el Gobierno y los Partidos Políticos de la Oposición para “crear las premisas políticas del medio externo del pluralismo político que aseguran el libre desarrollo de los Partidos Políticos”. De resultas de esta reunión, el 18 de Marzo de 1993, se firmó el Pacto Nacional entre el Gobierno y los Partidos Políticos de la Oposición. Con la firma de este Pacto Nacional se albergó la esperanza de que Guinea Ecuatorial empezaría a caminar hacia los derroteros de la Democracia pero sin embargo, las expectativas depositas en este sentido fueron de nuevo frustradas cuando el Gobierno violó unilateralmente los acuerdos adoptados desencadenando una ola de represión en todo el país contra los dirigentes, militantes y simpatizantes de los partidos políticos de la oposición, situación que sigue hasta ahora a veces con otros presupuestos pero con el mismo objetivo: Acabar con la disidencia en Guinea Ecuatorial y el retorno al Partido Único.

Ante este clima de crispación política permanente y de represión, ¿cómo se puede hablar de Diálogo Nacional sin antes haber sido desmanteladas todas las estructuras de opresión que encabeza Teodoro Obiang Nguema? ¿Lo que se quiere es volver a tropezar con la misma piedra para luego lloriquear que Obiang no cumple con sus compromisos?

La CORED no va a prestarse a ese juego del gato y el ratón porque ya lo tiene bien claro que si no hay un compromiso claro por parte de Obiang de abandonar el poder y así permitir a los guineanos discutir libremente sobre el futuro de su país, no puede haber un proceso de transición real y efectiva en Guinea Ecuatorial. Si el objetivo de algunos es ocupar espacios mínimos en el gobierno e institucionales dictatoriales que lo digan claramente y no vendernos la moto. La democracia en Guinea Ecuatorial sólo es posible sin Obiang y todo lo que representa su régimen.

Paris 7 de agosto del 2014

La CORED

Fuente: CORED

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