Malabo:  33°C | Rocío: 25°C
   Madrid:  23°C | Rocío: 03°C
 Malabo     Madrid
Logo de genet
      Buscar: en:   Noticias   Enlaces   Anuncios  

Login

Home
Intro/Ayuda
Noticias
Anuncios
Autores
Lenguas
Foro de Debates
Apuestas
Quiz
Calculador de Francos CFA a Euro
Calculador de Euro a Francos CFA
F CFA <---> Euro
Cambios Recientes
Contacto
Suscribirse
Foro/Chat
Estadística
Enlaces
Documentos
Promoción
Su página de inicio
Recomendar

¡Viva Patricio Nbe!

Visitas desde
06/02/2003 :


Rafi, heroina de la informacion
Rafi, la voz de los sin voz
Galeria de Ilustres de Guinea Ecuatorial

Formato para impresión Email anterior Noticias posterior Compartir en Twitter

Editorial

LAS LIBERTADES DE PRENSA Y DE EXPRESIÓN ESTÁN AHORCADAS EN GUINEA ECUATORIAL


publicado por: Association de la Presse Equatoriale Guinea el 17/01/2005 7:26:16 CET

GUINÉE EQUATORIALE
LIBERTÉ DE LA PRESSE/ RAPPORT

Guinée Equatoriale|Liberté de la presse
Dèrnier Rapport trimestrel de 2004.

ASOLPEGE_Libre
Association pour la Liberté de la Presse
y d’Expression en Guinée Equatoriale


LAS LIBERTADES DE PRENSA Y DE EXPRESIÓN ESTÁN AHORCADAS EN GUINEA ECUATORIAL

I
INTRODUCCIÓN
La ‘República’ de Guinea Ecuatorial vive en un inhóspito estado de sitio desde finales de 2003. Durante este periodo, sin lugar a dudas, el mas hostil contra la población indefensa desde 1979, el régimen de Teodoro Obiang Nguema, lejos de toda prerrogativa legal, ha triplicado salvajemente, con todas las formas sofisticadas a su disposición, la represalia contra los ciudadanos considerados ‘descontentos’ y ‘sospechosos’ de relacionarse, amistosamente o familiarmente, con la disidencia política de la diáspora, de la que acusa que está planificando una ‘invasión’ armada contra su imperio.

Las regiones de Niefang, Kogo y Mongomo, son las más castigadas en esta oleada y sistemática represión desatada en el país y que no hace más que recrudecerse a medida que pasa el tiempo. El régimen acusa a estas regiones de “cohabitar con los líderes del exilio para intentar cambiar el Gobierno a fuerza de fusiles”. Se da la casualidad de que de estas localidades son oriundos Severo Matías Moto Nsa, presidente del Partido del Progreso exiliado en el Reino de España y atribuido al supuesto intento de “invasión mercenaria” de marzo de 2004 ; Adolfo Ndong Biko, del Movimiento Nacional de Liberación exiliado en Estados Unidos y acusado de supuesto “asalto” contra la isla de Korisco y Cipriano Nguema Mba, Teniente Coronel también exiliado en el Reino de España e imputado de supuestos intentos de “golpes de Estado” denunciados por la dictadura en diciembre de 2003 y octubre de 2004, respectivamente.


Con la excusa de preservar la paz, la seguridad y la integridad territorial, mas bien del sistema despótico imperante en más de 25 años, la dictadura guineana ha puesto en cuarentena a quienes creen que guardan alguna que otra relación con la oposición del exilio y ha mandatado al ejército “abrir fuego ante cualquier indicio de resistencia o indisciplina ciudadana”. En el interior, las redadas, detenciones extrajudiciales, violaciones, saqueos y asesinatos son las reglas de juego de la milicia armada, que incluso ha llegado a ocupar militarmente a numerosos poblados de Mongomo. Los detenidos han sido sometidos a juicios militares, la mayoría celebradas a puertas cerradas [excepto el del supuesto caso de invasión mercenaria de marzo de 2004] y decenas de ciudadanos, en ausencia de las mínimas garantías jurídicas y procesales, han sido condenados hasta penas de cadena perpetua. La dictadura mantiene así a un indeterminado número de presos de conciencia en situaciones francamente de secuestro o de rehenes, que hacen frente además a condiciones infrahumanas en los incestos centros penitenciarios.

Empleando todos los métodos brutales a su alcance, numerosos ciudadanos de la región de Mongomo [el mismo que procede el presidente Obiang], están siendo vilmente torturados y recluidos después del 12 de octubre, por supuesta simpatía hacia el disidente Teniente Coronel Cipriano Nguema, a quien la dictadura atribuye una infructuosa “movilización de masas” para forjar su salida del poder mediante las armas. Las noticias que llegan de la zona son tan inquietantes, hasta el extremo de que se ha prohibido la concentración o reunión de más dos personas en el mismo lugar, incluido en bares de copas y casas de palabra [salones de reunión comunal en los poblados del interior de Río Muni, la parte continental del país].

Si bien no constituye ninguna novedad, pero la violencia conque el régimen carga contra la población guineana en los doce últimos meses es sin precedentes en la radícula historia sociopolítica del país centroafricano. Pero, no es de extrañar. Es exactamente lo que el régimen venía planificando con todos los medios a su alcance después de 1995, cuando la oposición aglutinada en la Plataforma Conjunta (POC) movilizó masivamente a la población en los escrutinios municipales. Desde entonces, los guineanos han asistido, con absoluta impotencia y desesperación, en el desvanecimiento de sus ansias por un Estado libre y democrático, como consecuencia del hostigamiento y de los comportamientos cada vez mas atroces del poder brutal de Teodoro Obiang Nguema hacia las manifestaciones y exigencias de una real apertura de transición democrática, conforme a los presupuestos constitucionales decretados por él mismo.

Sin embargo, no parece que esto haya tenido repercusiones fuera de las fronteras nacionales. Salvo ‘raros’ despachos de la prensa internacional y limitados informes de ciertas organizaciones no gubernamentales internacionales, ninguna otra institución, desde la propia Naciones Unidas, hasta la Unión Europea, para no citar la infructuosa Unión Africana, han osado en pedir al régimen de Malabo a que ponga fin a la puntiaguda violencia política desatada en el país con absoluta impunidad. Por el contrario, la propaganda gubernamental de que el país “está siendo constantemente amenazado por una invasión mercenaria” ha ganado créditos en los gobiernos occidentales, muchos de ellos con fuertes intereses económicos en la república bananera de Guinea Ecuatorial.

La denominada comunidad internacional continúa así haciendo oídos sordos a la grave situación sociopolítica de Guinea Ecuatorial que, en estos momentos, presagia todas las síntomas de una fuerte explosión social con resultados impredecibles: La disfuncionalidad del Estado de derecho, la persecución irracional de la disidencia política y los fraudes electorales, la corrupción gubernamental o la brutalidad del ejército, así como el estancamiento de las instituciones públicas hacia un despegue socioeconómico, cultural, técnico y científico, a pesar del crecimiento galopante de la economía nacional como consecuencia de la producción del petroleo, constituyen suficientes indicios para que los que luchan por la instauración de las libertades públicas opten a métodos violentos para poner fin a más de 25 años de un poder omnímodo que ve en la violencia contra la población como único ideario favorable. En este país está claramente manifiesto que todo el mundo está harto e irritado, y solo esperan el primer grito para purgar la rabia que les mantiene maniatado durante este cuarto de siglo de poder sanguinario de Teodoro Obiang Nguema.

II
LA PRENSA EN LUTO
LA MUERTE DEL COLEGA RAMÓN N’NAR, DURO GOLPE EN EL GREMIO PERIODÍSTICO GUINEANO
Ramon N’NAR NSIE, falleció repentinamente en la tarde del martes, 12 de octubre de 2004 en el Reino de España donde, como el resto de la mayor parte de sus colegas, se exilió en 1998, por razones de persecución política. Murió en plena actividad profesional, cuando junto a su colega y amigo Pedro Nolasco estaban entrevistando al opositor Andrés Moisés MBA ADA, para la cuarta edición del periódico El Muni [del que era cofundador y Director]. Al término de la entrevista, que duró alrededor de una hora, Ramón sufrió un ataque de asma [enfermedad que venía padeciendo] y que esta vez le causó complicaciones cardiovasculares. Sus restos mortales descansan provisionalmente en el cementerio municipal de Torrejón de Ardoz (Madrid), en espera de que sean definitivamente depositados en una Guinea en libertad, de la que tanto deseó vivir, pero que la vida le ha negado esta oportunidad.

Como lo ha reconocido la ASOLPEGE_Libre, asociación en la que era Secretario General, la figura de Ramón será insustituible durante mucho tiempo en el difícil camino hacia la instauración de la libertad de prensa y de expresión en Guinea Ecuatorial. Su compromiso por estos idearios le había convertido en un decidido y abnegado militante, y casi todos sus esfuerzos en los últimos tiempos estaban encaminados a conseguir este objetivo. La creación de El Muni, la refundición de la ASOPGE en ASOLPEGE_Libre (Asociación para la Libertad de Prensa y de Expresión en Guinea Ecuatorial) y la búsqueda de los medios necesarios para transformar ambos proyectos en eficaces armas de lucha contra la impunidad política en Guinea Ecuatorial y en auténticos instrumentos para la instauración de un debate público sobre la caótica situación sociopolítica del país, serían no solo sus últimas voluntades sino sus proyectos de vida.

La desaparición de Ramón deja un gran hueco difícil de llenar, teniendo en cuenta la ardua tarea de propiciar una prensa libre e independiente en Guinea Ecuatorial con suficiente capacidad técnica-profesional para influir en el debate público, hasta ahora inexistente. Si bien la lucha por las libertades democráticas, el fomento de la prensa independiente y el libre ejercicio del periodismo están en la mente de todos los profesionales guineanos, pero muy pocos como N’NANR NSIE han consagrado su vida al respecto con ejemplos prácticos e indiscutibles. A pesar de la dura vida del exilio, donde se debate mas bien por la supervivencia que por los ideales [por mas buenos que pareciesen], Ramón supo armarse de coraje y valor, arriesgando incluso sus modestos ingresos, para poner en marcha el periódico El Muni, del que albergó muchas esperanzas en que pronto se convirtiese en el mejor portavoz y embajador de la causa por la democratización de Guinea Ecuatorial cerca del mundo occidental, y en un trascendental órgano de información para los guineoecuatorianos y para los ciudadanos subsaharianos en el mundo hispano. Esta es la vocación y el espíritu profesional que presidió a los cofundadores de este incipiente periódico.

Este sueño que ya nunca verá en este mundo sigue intacto en sus compañeros de la ASOLPEGE_Libre, ahora mucho más comprometidos para continuar con esta gran labor y mantener vivo el ideal de uno de sus principales artífices. Claro que no será fácil y como siempre decía el mismo Ramón, “estamos convencidos y esperanzados de que algún día encontremos con una mano de Dios para materializar estos proyectos”, tan vitales en el contexto de la lucha por la democratización de la agonizada Guinea Ecuatorial.

Los restos mortales de N’NAR fueron enterrados el 15 de octubre, en medio de un gran dolor, que movilizó a gran parte de sus colegas , amigos, familiares y políticos guineanos exiliados y residentes en España. El domingo, 17 de octubre, y durante la misa fúnebre, sus compañeros le rindieron un calido homenaje póstumo, en el que quedó manifiesto la dimensión no solo profesional sino humanamente sentida de este emblemático luchador por las libertades.

Licenciado en Ciencias de Información y especializado en temas de opinión y políticos, N’NAR ostentaba hasta el día de su muerte las responsabilidades de Director y Editorialista de El Muni, Secretario General de ASOLPEGE_Libre y Responsable de Relaciones Internacionales de Demócratas por El Cambio, DECAM, una plataforma creada en España y que aglutina a muchos partidos políticos, asociaciones y organizaciones no gubernamentales guineanos de la diáspora.





III
VIOLACIONES DE LIBERTAD
III.I. LIBERTAD DE EXPRESIÓN.- La libertad de expresión, de opinión o de manifestación siguen siendo verdaderos tabúes en Guinea Ecuatorial, salvo en momentos bien calculados como en las campañas electorales, cuando el régimen concede ridículos si no vigilados márgenes de movimiento a las organizaciones políticas.

En nada se ha avanzado con respecto a la era de partido único. El martirio contra el uso de la libertad de expresión se ha generalizado de tal modo que el régimen ya considera a muchos de sus antiguos fieles colaboradores como potenciales críticos contra su política liberticida y monstruosa. Precisamente, el temor a ser considerado como sospechoso y sufrir las consecuencias que ello acarrea ha incrementado de forma inimaginable el grado de sumisión y de obediencia ciega de los ciudadanos hacia el régimen, mientras la idea de que “nada es capaz de terminar con la dictadura de Teodoro sobre la faz de la tierra” se hace cada vez mas inapelable entre los súbditos, rendidos en el infortunio, la ofuscación y en la desesperación absolutas.

La situación es especialmente muy dura en los últimos años. En la actualidad no existen cifras concretas sobre el número de personas encarceladas en las prisiones del país. Los presos, que superan más de un centenar, son todos víctimas de una persecución insensata desencadena con toda ferocidad después de 2002 y muchos de ellos no han cometido otros delitos que el uso de la libertad de expresión y de opinión, contemplados en el artículo 13 de la Constitución.

Las famosa trilogía, “ver, oír y callar”, se ha convertido en el modus vivendi de la población. El hostigamiento es sin igual contra quienes pretenden llevarse la contraria, y el régimen considera de “delitos” muy graves las críticas contra sus excesos de poder y comportamientos amorales, sobre los que los tribunales pueden dictar severas condenas. Pero, en Guinea Ecuatorial, rara vez dichos casos adquieren la debida transcendencia, a menos que los organismos internacionales competentes presionen sobre la creación de una comisión internacional independiente para analizar la naturaleza de los presidiarios políticos que languidecen en las cárceles del país, acusados, muchas veces, por supuestos delitos de sublevación, simplemente para evadirse de las críticas de organizaciones pro derechos humanos internacionales.

III. II. ESCUCHAS TELEFÓNICAS.- Las escuchas telefónicas se han intensificado en Guinea Ecuatorial. El Gobierno tiene pinchada la red telefónica nacional a través de su sistema de información, llamase de espionaje, con sede en el mismo edificio que alberga también las oficinas de la compañía paraestatal de “Guinea Ecuatorial de Telecomunicaciones”, GETESA.

En lo que va de los últimos nueve meses, es decir, desde marzo del presente año, diversos casos se han presentado, con la detención y posterior toma de declaraciones en la Policía, fundamentalmente en Bata y en Malabo, de ciudadanos que hayan mantenido contactos telefónicos desde el exterior con gente o instituciones odiadas por el régimen.

Las víctimas son fundamentalmente amigos, compañeros o familiares de los políticos del exilio. Si bien pocos terminan recluidos en los calabozos de las comisarias de policía durante días e incluso meses, en la mayor parte de los casos se trata de prácticas intimidatorias que el régimen emplea para mantener alejados a los opositores del exilio de sus círculos familiares del interior del país y, en última instancia, para demostrar ante el público su capacidad de control sobre todos los seres vivientes del país.

Se trata de pura táctica de “engaña bobos”, porque de esta forma, se acrecienta el temor ciudadano de mantener informados, sean a sus líderes del exilio, sea a las agencias de prensa u organizaciones pro derechos humanos, de la barbarie que pesa sobre ellos día tras día.

III.III. LIBERTAD DE PRENSA.- En la primavera de 2003, ante la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra, el entonces vice primer ministro encargado de Trabajo y de Derechos Humanos, Jeremías Ondo Ngomo prometió, en nombre del Gobierno, una ayuda de 200 millones de francos CFA para el fomento de una prensa independiente en el país. El anuncio se produjo meses después de que el Relator Especial para la Libertad de Expresión de las Naciones Unidas, Ambeyi Ligabo, visitara Malabo y emitiera un informe en el que criticó la falta de libertad de prensa y de expresión. Casi dos años después, el régimen no solo ha incumplido su “buena voluntad”, sino ha endurecido más su odio y repulsa hacia el libre ejercicio del periodismo.

La situación sigue siendo prácticamente la misma o peor que antes. En el país no circula siquiera un “panfleto” informativo digno de denominarse prensa, en su real sentido. Ni el periódico gubernamental Ebano o la revista progubernamental La Gaceta pueden catalogarse en el sentido profesional de la prensa. Mas bien, y a juzgar por su calidad informativa y el tratamiento de la actualidad, únicamente se dedican a la propaganda gubernamental y al narcisismo político.

Los periódicos independientes El Tiempo y La Opinión, continúan en igual quiebra que crisis, anclados en la falta de medios financieros, la imposibilidad técnica-profesional y la renuncia de su propio promotor a vertebrarlos en medios profesionales que sirven única y exclusivamente a la opinión pública.

En este último trimestre de 2004, el régimen ha dejado claro cuál es el curso de su política sobre libertad de prensa. Estos son los casos más relevantes:

III.VI
CASOS DE VIOLACIÓN DE LIBERTAD DE PRENSA

1.- Carné profesional “oficial”. En septiembre del presente año, entró oficialmente en vigor el carné profesional de los periodistas guineanos. El ministerio de Información, Turismo y Cultura, y la ya oficializada Asopge emitieron el documento que acredita a los que ejercen en sus rústicos medios como periodistas.

La decisión es insólita para los países con una constitución democrática pluralista, como es el caso de Guinea Ecuatorial, desde 1991. El régimen, sumiso en la ignorancia e incapacidad política, viola así sutilmente la Declaración de Windhoek sobre el fomento de una prensa libre, independiente y pluralista en África. En cualesquiera que sea la forma en que se desarrolla la actividad profesional de los periodistas en los países con constituciones democráticas, las asociaciones de prensa “independientes” son las únicas instituciones facultadas para acreditar y quitar el carné de periodista a los profesionales de la Prensa. Toda ingerencia gubernamental en este sentido viola flagrantemente la libertad de prensa y el libre ejercicio del periodismo, y atenta contra la ética y la deontología profesional.

La obsesión del régimen por el control absoluto de los medios de comunicación social y sus profesionales, muchas veces le obliga a cometer errores sencillamente catalogados “de mediocridad e infantilismo político”. Los casos, primero de la institucionalizacion de la ASOPGE y después la oficializacion del carné de periodista, son más que pruebas suficientes de que tanto el régimen y concretamente el ministerio de Información, Turismo y Cultura, no tienen ni pie ni cabeza sobre la organización de la prensa en un Estado que se precia de democrático.

Por otra parte, la ASOPGE, ilegalizada en mayo de 2002 por el Gobierno e institucionalizada a mediados de 2003 como sección ministerial del departamento de Información, no tiene facultad jurídica ni asociativa de emitir el carné de periodista a ningún profesional. Por tanto, el carné de periodista vigente en Guinea Ecuatorial es considerado, a todas luces, ilegal y no sirve de nada para acreditar a los profesionales de prensa como periodistas en ninguna parte del mundo, salvo en esta misma república bananera.

Según se desprende de las informaciones recabadas cerca del ministerio, ha sido el empresario español Roberto Martín Prieto Escolaza [Director de la revista progubernamental La Gaceta], el promotor de ese carné, de dudosa credibilidad, tanto legal como profesional.


2.- Sanciones económicas en RTV. En la segunda quincena de octubre, los periodistas de Radio Televisión guineana, conmocionados por la noticia de la muerte de Ramón N’NAR NSIE [quien fuera su compañero de trabajo entre 1993 y 1998], se unieron entorno al dolor y decidieron hacer pública la noticia en los medios estatales así como organizar una misa en su memoria. La misa se celebró, a pesar de las amenazas intimidatorias del ministerio de Información, y la noticia también se hizo público por radio televisión, aunque solo en los primeros diarios hablados y telediarios.

El ministro de Información, Alfonso Nsue Mokuy [opositor domesticado], con los nervios a piel de flor, irrumpió en la sede de radio televisión nada mas escuchar la noticia e intimidó tanto a los locutores de turno así como el autor de la noticia, que no fue otro que el Director General de Radio Televisión, Virgilio Seriche Riloha, quien fue amonestado y sancionado económicamente por quince días de haberes de su salario, junto a los realizadores de turno. El comportamiento del ministro demuestra hasta qué grado el régimen de Guinea mantiene su odio hacia los periodistas de la prensa independiente, a quines siempre ha considerado como auténticos blancos llamados a ser abatidos.

V
LIBERTAD DIGITAL: EL CASO DE INTERNET
Si el sistema de acceso a Internet existe en Guinea Ecuatorial no es tanto por la voluntad política del régimen, sino por los intereses económicos que defienden los franceses que invierten en la empresa paraestatal GETESA. Desde hace años, el régimen está viendo cómo el control que mantiene sobre la información local escapa cada vez más de sus manos. En 2000, el presidente del Parlamento, Salomón Nguema Owono, ya manifestó que “en África ir en contra de Francia es ir en contra de Dios”, en relación a las quejas interpuestas por ciertos parlamentarios sobre el abuso de las tarifas telefónicas. Esta es la razón por la que el régimen aún sigue sin prohibir el uso de la red de redes, Internet, en Guinea Ecuatorial.

Coincidiendo con el oficioso estado de sitio decretado en marzo del presente año, Malabo ha incrementado su control sobre las escuchas telefónicas y el acceso a Internet. En este último caso, parece que el control es tan rutinario como simple. En los pequeños cibercafés de Malabo y Bata, se ha destinado secretamente a agentes de seguridad, que tienen que permanecer en los cibercafés durante el tiempo que dura su jornada laboral. Su misión es identificar a los usuarios y espiar el tipo de mensajes que envían y reciben de sus cuentas de correo, así como las páginas Web que visitan.

En el extremo más sofisticado, los servicios de espionaje de GETESA han contratado a ingenieros cubanos para espiar y controlar el contenido de mensajes que envían y reciben los ínternautas guineanos. En este caso como en el de las escuchas telefónicas, muchos usuarios han sido amenazados, intimidados o represaliados por la dictadura. En ambos casos, es decir, escuchas telefónicas y control de Internet, se acostumbra a acusar a los sospechosos como “colaboradores de la oposición del exilio” y de “difamadores” del Gobierno en el exterior.

VI
LIBERTAD DE PRENSA PARA GUINEA DESDE LA DIÁSPORA
Las posibilidades de que la sociedad guineana cuenta con una prensa libre e independiente son todavía muy escasas debido, entre otras cosas, a la mediocridad gubernamental en materia de libertades públicas. El régimen de Malabo, tan intolerante como ignominioso, vapulea con insoportables métodos de persecución cualquier movimiento tendente a cristalizar el uso de libre ejercicio del periodismo, como muestra la institucionalizacion de la ASOPGE y la desaparición de los periódicos independientes El Tiempo y La Opinión.

Lejos de su tierra y siempre animados con su espíritu de lucha por la instauración de la prensa libre que repercute en la opinión pública nacional, los periodistas guineanos exiliados en España han optado por hacer realidad este viejo sueño, que dura desde 2004, cuando apareció el primer periódico independiente El Sol, de manos de los colegas Fermín Nvo Mbomio, Sinecio Ngua Esono y Antonio Ndong Ayong Nchama, quienes permanecen inamovibles en el interior del país sin mínimos movimientos de libertad ni medios materiales, económicos o técnicos-profesionales para relanzar su periódico, desaparecido en 1996, por problemas económicos urdidos por el hostigamiento gubernamental. La creación de El Muni y la ASOLPEGE_Libre, mantienen en alto, aunque desde el exilio, el espíritu reivindicativo por una prensa libre en Guinea Ecuatorial.

VI.I. EL PERIÓDICO EL MUNI
La refundición de ASOPGE en ASOLPEGE_Libre y la creación del periódico El Muni responden a las exigencias de la sociedad guineana de tener acceso a la información y disfrutar de las ventajas de la libertad de expresión y de opinión, consagrados en el articulo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 y en la Declaración de Windhoek de 1991, sobre el fomento de una prensa independiente, libre y pluralista en África.

No obstante, desde su puesta en marcha el 3 de mayo de 2004, El Muni [editado por la ASOLPEGE_Libre] no parece estar muy lejos de los problemas estructurales que arrastra la prensa en el interior de Guinea Ecuatorial. La falta de medios económicos, sobre todo, han impedido que hasta la fecha este periódico logre sus objetivos fundacionales, mas bien tiene que hacer frente a la desaparición física de uno de sus principales cerebros, Ramón N’NAR NSIE.


Todavía es prematuro predecir el futuro inmediato de este órgano informativo, nacido para convertirse en una de las principales fuentes de información sobre la temática de Guinea y de los países subsaharianos en el mundo hispano. En la actualidad, la ASOLPEGE_Libre está redefiniendo el proyecto para presentarlo a diversas organizaciones y personas físicas, interesadas en la problemática de la democratización y la instauración de un debate público en Guinea Ecuatorial, garantizado por una prensa independiente sin intereses propagandísticos ni ideológicos.

La ASOLPEGE invita entusiastamente a todos aquellos guineanos y extranjeros de buena voluntad para que se unan en torno a este proyecto, que puede llegar a convertirse en un importando medio de presión político-social contra la dictadura ‘nguemista’, si llega a contar con los medios materiales y económicos suficientes para despegar su salida al mercado periodístico español. En sus primeras ediciones de mayo, julio y septiembre, El Muni ha publicado un total de 8.000 ejemplares, de los cuales 6.537 han sido vendidos, lo que presagia su supervivencia en el mercado periodístico.

En febrero del 2005, está previsto que el El Muni entre en su segunda fase como publicación quincenal, lo cual requiere mucha inversión, del que la ASOLPEGE_Libre cree que puede ser cubierta por los propios guineanos, del interior y de la diáspora, antes que acuda a las organizaciones y personalidades del exterior [ los interesados en contribuir a la materialización de este proyecto pueden contactarse con la ASOLPEGE_Libre o directamente con El Muni en las siguientes direcciones de correo electrónico: asopge_ngo@hotmail.com, elmuni_redaccion@hotmail.com APDO. de Correo: 11142. C.P 46080, Valencia (España)].

VII
LA ASOLPEGE_Libre
Estas siglas, corresponden a la Asociación para la Libertad de Prensa y de Expresión en Guinea Ecuatorial, con sede en España. Después de la apropiación de la antigua ASOPGE por el Gobierno guineano, los profesionales tanto del interior que del exilio, han optado por refundirla y ampliar su marco operacional, que a partir de ahora se ocupa de temas de libertad de prensa, opinión y de expresión. Sus primeras actividades han sido precisamente la puesta en marcha del periódico El Muni. La sede de la ASOLPEGE_Libre está situada en la ciudad española de Valencia y próximamente contará con representaciones en Madrid y Barcelona.


HECHO EN VALENCIA, A 22 DE DICIEMBRE DE 2004
POR LA LIBERTAD Y LA SOLIDARIDAD DE LA PRENSA

EL CONSEJO DIRECTIVO-PRESIDENCIA DIRECCIÓN





































Fuente: asolpege_libre

¡Nota importante!
El contenido de los artículos publicados no refleja necesariamente la opinión de la redacción de guinea-ecuatorial.net
Véase también la declaración sobre el uso de seudónimos

Usuarios en linea: 2673


Noticias
Recientes

Síguenos en:

© Guinea-Ecuatorial.net (Nvo Zang Okenve 2004 - 2014) - Foro Solidario por Guinea. Todos los derechos reservados. email: info@guinea-ecuatorial.net