LA ANTOLOGÍA DEL SECUESTRO Y ASESINATO DE JOSÉ ANTONIO ONDO

(MAIKEN)

Pasado una semana, en la madrugada del 7 a 8 del presente mes de abril de 2014, la familia José Obiang Mba Maye a la que pertenezco, fuimos víctimas de un asesinato político sin que tengamos nada en relación con la política de Guinea Ecuatorial.

Nuestra familia, desde que el país accedió a la mal llamada independencia, en 1968, hace hoy 46 años, nunca hemos participado, ni por activa, ni por pasiva en la política de este país. ¿A qué viene ese asesinato político? ¿En qué se justifican este secuestro y posterior asesinado vilmente de un adolecente inocente, de tan sólo 19 años? ¿A qué viene este ataque contra una familia tan humilde como es la nuestra?

Quiero dejar claro que el asesino o los asesinos, no han confundido a su víctima. Ni tampoco la víctima era miembro de una familia de políticos como pretendieron interpretar algunos. Sino natural de Akam Esandon, del distrito de Ebibeyin. Hijo de madre soltera.

El adolecente estudiaba en el INEM de Mongomoy era miembro de la orquesta filarmónica de la Basílica de esta misma localidad, dirigida por la Congregación de la Inmaculada Concepción. A través de este coro católico, el  Alcalde de dicha localidad, Santiago Eneme Ovomo, más conocido como ALANDI, primo hermano del generalísimo Obiang Nguema Mbasogo, sugirió a la Hermana Modesta, monja de la citada Congregación, directora del coro y natural de Mebewele Niefang, que organizara una excursión con los jóvenes del coro en las inmediaciones del río Wele, del poblado de Efac Elasok, donde desapareció el joven. Nada más llegar al destino, de repente, apareció el vehículo oficial del Alcalde con cuatro ocupantes. Pero nadie pudo imaginar que el suceso pueda tener algo en relación con la aparición del vehículo del alcalde. Todas las primeras hipótesis se apuntaban al rio. De hecho, se concentraron todos los esfuerzos en buscar al niño en el rio, suponiendo que a lo mejor habría sido arrastrado por la corriente de agua. Hasta que, 24 horas después de su secuestro, cuando todo el pueblo de Efac Elasok, miembros de la familia y colaboradores se  volcaron en buscar al niño en el rio; y como podéis imaginar que esos tipos de operaciones, no a todos le gustan por su forma, aunque participa a la hora de su ejecución o están cansados de verlos periódicamente. Apareció un miembro de Akuacam y alertó a los buceadores que el niño que suponíais que habría sido arrastrado por la corriente del rio, fue secuestrado por el Alcalde ALANDI, hasta indicó el lugar exacto donde le tenían encerrado durante 3 días a la espera de la reacción de la familia para ser degollado.

72 horas después de su secuestro, por fin se cumplieron con sus amenazas con sacrificarle. Últimamente, trasladaron el cuerpo sin vida al lugar del secuestro para tratar de confundir a la opinión pública. Todo ello, en complicidad con la monja.

Curiosamente, la negligencia de las autoridades a encontrar el asesino o los asesinos; no solamente dejó boquiabierto a los familiares, tras recibir información de la boca del gobernador Deogracias Olomo Abia, también apodado (ALANDI)acompañado del delegado de gobierno Manuel Nguema Ondo, que el obispo de la diócesis de Ebibeyin, Juan Nsue Edjang, se había llevado a la monja en Ebibeyin, sino también, la noticia le cayó como un jarro de agua fría y le obligó renunciar la denuncia que quisieron presentar contra la monja. Así se quedó sin efecto el asunto.

Más tarde, ni las autoridades judiciales quisieron asumir sus competencias, ni la policía quiso investigar el caso para encontrar al asesino o los asesinos.  Llegados a este punto, pocos podrían dudar de quiénes estaban detrás de este secuestro y vil asesinato de un adolescente, inocente, de 19 años.

 Y mi pregunta es: ¿se puede saber el porqué, por qué precisamente una familia tan humilde que está luchando por su subsistencia como es la nuestra puede ser castigada de esta manera?

Esto no es un régimen político sino una mafia. Una mafia que se escode detrás de la política para hacer el mal impunemente. El petróleo que para otros países, los exportan para proteger a sus ciudadanos de la miseria, se ha convertido en una maldición para el guineoecuatoriano. Y espero que este suceso, sirva como prueba de más, para aquellos que otorgan a este hombre títulos de honoris causa por su buena gobernabilidad.

Caber decir que tras hacerse públicos estos detalles, mi vida y la de los míos corren peligro porque el tirano, con su petróleo, está libre de asestar un golpe a cualquier guineoecuatoriano esté donde esté. Pero como ya no tengo nada más que temer a parte del daño que nos han causado en la familia, afrontaré con todas las consecuencias esta publicación y espero que cualquier medio: periódico, radio o televisión etc., e incluso instituciones internacionales a las que iré enviando esta noticia,  lo publiquen y tomen en serio.

Obiang TESIFONTE.