“Aunque unos pocos temen que el espíritu de Macías quede vagando por las laderas esmaltadas de verde y las gargantas insondables del monte Basile, todos saben que ya no podrá hacer daño” (Rafael Fraguas, enviado especial del periódico El País en el juicio a Masie Nguema 30 de septiembre 1979).
Con la última detención del cantante y rapero Benjamín Ndong (Djamín Dogg), Guinea Ecuatorial regresa definitivamente a la dictadura del sanguinario dictador Francisco Masie Nguema Biyogo (1979). Por si alguno no lo sabía, Francisco Masie Nguema, quien cambió su nombre fang Mesie, por el español Macías no es un cadáver, está vivo en la República de Guinea Ecuatorial de hoy. Las mismas persecuciones, los mismos encarcelamientos, las mismas torturas, la misma megalomanía de hacer daño, las mismas acusaciones, los mismos asesinatos, las mismas conspiraciones, las mismas causas y los mismos efectos, que los guineanos sufrieron en su dictadura, resurgen en la Guinea Ecuatorial actual. El espíritu de Francisco Masie Nguema, ya no está vagando en las laderas esmaltadas de verde y las gargantas insondables del monte Basile como escribió Rafael Fraguas, enviado del periódico El País en el juicio de 1979, sino que está totalmente encarnado en la figura del Vicepresidente y está infringiendo el mayor daño posible en el corazón mismo de Malabo, capital de Guinea Ecuatorial.
Hace menos de dos meses un opositor regresaba de un viaje a España, fue detenido y recluido en las dependencias de “Guantánamo” (sede de tortura de la Policía de Malabo), semanas después la policía represiva del régimen detuvo al presidente y su adjunto del CEID (Centro de Estudios e Iniciativas para el Desarrollo). Un par de días más tarde, la policía de la dictadura volvió a detener y a tortura indiscriminadamente a un centenar de taxistas que habían exigido al gobierno, a través de una huelga, bajada de tasas para poder ejercer sus servicios de taxi. Mientras estaban siendo torturados, el régimen nos volvió a sorprender con la detención y encarcelamiento de forma arbitraria al Coordinador General del Partido Político Ciudadanos por la Innovación (CI) y las amenazas del ministro del Interior al Secretario General de Unión Popular (UP). Hoy la dictadura vuelve a detener al cantante de Hip Hop, al parecer, por una crítica canción sobre la huelga de los taxistas y sus consecuencias.
¿Qué ha cambiado en cuanto al respeto de los elementales derechos humanos en Guinea Ecuatorial desde el tiempo de Mesie Nguema Biyogo hasta Hoy? Nada.
Francisco Mesie Nguema persiguió duramente a sus rivales políticos y a los intelectuales del país, lo mismo ocurre en la Guinea actual. Francisco Mesie Nguema Prohibió todos los partidos políticos tradicionales y fundó el Partido Nacional de los Trabajadores (PNT), al que convirtió en el Partido Único de Trabajadores del país (PUNT). La dictadura de Teodoro Obiang Nguema fundó su Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (PDGE), que hoy se ha convertido en el único partido que existe actualmente en Guinea Ecuatorial (PUGE).
Debido a su mala gestión la economía del país, en tiempo de la primera dictadura, entró en una profunda crisis en 1971, a lo que contribuyó la nacionalización de la economía. Hoy 2017, la mala gestión y la corrupción de la dictadura de Teodoro Obiang Nguema ha llevado a Guinea Ecuatorial a una profunda crisis y la dictadura actual opta por nacionalizar la economía empezando por la nacionalización de los taxis. Los que vivieron en la anterior dictadura se acordarán el violento conflicto que estalló en el año 1976 con los 20.000 trabajadores guineanos que habían venido a la recolección de Cacao y Café en la isla de Bioko y que trabajaban en condiciones infrahumanas. Como represalia, Francisco Mesie Nguema ordenó a los paramilitares de las Juventudes en Marcha con Macías a detener, torturar y matar a los manifestantes.
La huelga de los taxistas en Malabo del 2017 es equivalente a la huelga de los trabajadores en 1976. La persecución, detención, tortura y muertes que desató la milicia Juventudes en Marcha con Masie, es exactamente la misma que la Policía de Guantánamo está aplicando a opositores, taxistas, cantantes, y todas las personas que están en desacuerdo con la dictadura.
Que sepamos, Guinea Ecuatorial, no se ha movido ni se ha detectado un ligerísimo cambio a la democracia y al respeto de los derechos humanos. Si bien, el espíritu de Francisco Masie Nguema está totalmente reencarnado y reposado, hoy mismo, en la persona del Vicepresidente de la República. Rafael Fraguas (el País 30/09/1979) nos recordaba que Francisco Masie Nguema fue ejecutado junto con su sobrino Bienvenido Micha, Salvador Ondo Elá, Fortunato Mba, Pastor Nsue, Eduardo Edu y Miguel Eyegue, los más temidos torturadores que obedecían órdenes del dictador utilizando su imaginación sanguinaria. La realidad vuelve a ser la misma: los temidos torturadores del régimen actual sobrinos, familiares y amigos del dictador de Guinea utilizan la misma imaginación sanguinaria para reventar los pies, las manos y la cabeza a los disidentes.
La dictadura de Guinea Ecuatorial actual ha vuelto, con esta última detención, arrojar la provocación, con el fin de ver si alguien se atreve a hablar del desastre en el que los mediocres más mediocres que jamás gobernaron Guinea Ecuatorial han convertido el presente y el futuro de nuestro país, que dentro de muy poco tiempo se va a explotar. Esta dictadura corrupta e idiota ha creado un 80% del paro juvenil, han desmantelado todo el aparato productivo del país logrando dejar vacía la hacienda pública. La dictadura ha desmembrado nuestro territorio y a ha reeditado las viejas heridas. Con las persecuciones y torturas están reeditando un instrumento de rencor que tanto daño hizo en tiempo de Francisco Masie Nguema Biyogo.
A mí, personalmente creo que no es de recibo el odio, las enemistades, las sospechas entre nosotros, que la dictadura vuelve a generar ahora entre los guineanos reescribiendo las viejas prácticas que tanto daño hizo a Guinea Ecuatorial en tiempo del dictador Francisco Masie Nguema Biyogo. La permanente política de hostigamiento, de persecución, de tortura, de sumisión, de caza de brujas, nos ha hecho recuperar la triste memoria del pasado dictatorial de Francisco Masie Nguema. Y nos vuelve a colocar en un país que sus únicas amistades del exterior vienen hacer países represivos. La manía que tienen las dictaduras de aplicar la fuerza, en lugar de la persuasión, para mantenerse en el poder, les hará conseguir efectos contrarios.
Si esta dictadura se agobia con una simple quedarse en casa de medio centenar de taxistas y la canción de un muchacho de 20 años, no quiero pensar si el Lunes 29 de mayo haya 10.000 mil jóvenes exigiendo la liberación del Cantante de Hip Hop Benjamín Ndong “alias Djamin Dogg” seguro que ni el padre ni el hijo llegarían a celebrar sus próximos cumpleaños. La constante y continua provocación de la dictadura de Guinea Ecuatorial, debe lograr una contundente respuesta pacífica lo antes posible. Mientras invitamos a que regresen a la razón, que respeten la libertad del expresión y los derechos de los ciudadanos.
Fuente: Opinion/reflexión
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