N O T A I N F O R M A T I V A
NUEVAS PRESIONES Y RESTRICCIONES SOBRE LOS RECLUSOS DE BLACK BEACH. Tras la visita a la prisión de Black Beach del Director General de la Seguridad Presidencial (en lo sucesivo DGSP) el pasado día 25 de junio, el ambiente en la cárcel se ha vuelto a crispar debido a los enfrentamientos, todavía verbales, entre un grupo de presos encabezados por Marcelo SEME NSE, alias ”Semito”, animados por el Administrador de la Cárcel Pública (en lo sucesivo ACP), que, a su vez,se supone que sigue las instrucciones del DGSP. Dicho grupo se manifiesta partidario de la redacción y firma de una carta autoinculpatoria por parte de los presos dirigida al Jefe del Estado, en la que, además, se le suplicaría el perdón al objeto de que use de su derecho de gracia para liberar a los presos políticos. Según dicen, el DGSP habría manifestado que la puesta en libertad de los presos político estaría ya decidida y que sólo faltaba este simple requisito.
Frente al grupo anterior se ha creado otro imaginario, llamado el de los políticos, quienes por tener resueltos supuestamente sus problemas vitales, no tenían ningún interés en salir de la cárcel, así como que tampoco les importa el sufrimiento de unos pobres jóvenes inocentes que nunca han estado en ninguna formación política, ni siquiera interesados por la existencia de la oposición, y, no digamos de FDR.
Las tretas para ”comprar” las voluntades que estuviesen decididas a firmar el documento, todavía no redactado, resurgieron con inusitada fuerza el pasado 25 de junio. Dos días después, al no haberse logrado todavía que una buena parte de los reclusos se plegaran a la sucia jugada, los responsables de la prisión han decidido y comunicado a los presos que, a partir del 27 de junio, la hora de cierre de todas las puertas de la prisión, es decir las de todas las naves, sería a las 17:30 horas en lugar de las 20 ó 21 horas como venía siendo desde el pasado mes de mayo.
El ACP puntualizó al dar a conocer el nuevo horario que eran nuevas instrucciones y que obedecían al hecho de que la ”gente” se trasladaba a Bata.
El traslado de la ”gente”, es decir, las autoridades a Bata, concretamente del Jefe del Estado y allegados, fue esgrimido por el ACP como una amenaza, con claro propósito intimidatorio en una entrevista mantenida con Guillermo Nguema en la mañana del 26 de junio, lo mismo que en otra, pero por la tarde, en compañía de Plácido Mico. El ACP dijo ser partidario de
que la gente firmara la carta para conseguir la medida de gracia del jefe del Estado tan pronto como éste llegara de su viaje a Washington y antes de que se trasladara a la región continental del país. Pues, según ACP, si la gente no firmaba el documento y el presidente Obiang se iba a Bata sin haber sacado a los presos de la cárcel, él, como administrador de la prisión, estaba en condiciones de decirles que durante los seis meses de la estancia de Obiang en Bata habrían muchos problemas en Black Beach que no podría evitar ni resolver, amén de que podría ceder a las presiones de los que querían mal a los presos políticos. Consecuentemente, insistió en que los presos fueran realistas e hicieran caso a las sugerencias que se les hacía para poder salir de la cárcel antes de que el presidente Obiang se trasladara a Bata.
Por eso, con la primera medida del encierro a las 17:30, el ACP quería dejar claro que sus amenazas iban en serio, de allí que se empiece a notar un cierto miedo entre la población reclusa porque saben las consecuencias que se pueden derivar de las amenazas.
”Semito” es un individuo medio loco cargado de mucha malicia y rencores. Durante el juicio declaró que había actuado como espía a las órdenes de su primo Ela Ebang, entonces embajador de Guinea Ecuatorial en Gabón, a quien informaba de todos los pormenores de las reuniones que celebraba Ondo Obiang en el país vecino. La citada declaración trajo consigo que Ondo Obiang le considerara como traidor, lo que se manifestaba en sus constantes enfrentamientos en los 12 primeros meses de prisión. Últimamente parece que ”Semito” habría informado, como espía que es, al ACP y al DGSP que Felipe Ondo Obiang era uno de los principales obstáculos al plan de la carta al presidente Obiang (plan que tiene como objetivo la reinserción al PDGE de los reclusos políticos), porque muchos de éstos eran parientes muy cercanos (hijos, sobrinos, cuñados, nietos, etc., etc...) por lo que se le tenía, a Ondo Obiang, mucho respeto y/o miedo. Y esta fue la razón por la que se le trasladó a la cárcel de Evinayong.
Las actuales presiones dieron inicio después del traslado de Ondo Obiang, si bien de un modo sutil hasta que hace cosa de un par de semanas aproximadamente, Guillermo Nguema tuvo un encuentro con el DGSP y le dijo que fuera claro y expresara qué era lo que quería en realidad. El DGSP le dijo que en Mongomo no se quería otro partido porque ello traía consigo la división y enfrentamientos entre los hijos del distrito, por lo que no estaban dispuestos a permitirlo y se le aconsejaba, por el contrario, a que depusieran de su actitud y abandonaran el proyecto FDR. Nguema Ela le contestó que le daría la respuesta después de un análisis sobre el tema, además de que tenía que hablar con los otros presos para reflexionar sobre el particular, porque no se trataba de una cuestión personal suya.
Sin embargo, el día 25 el DGSP llegó a la cárcel y nada más atravesar el patio de la prisión preguntó por Guillermo Nguema Ela, pero no le hizo llamar sino que se encerró con el ACP en el despacho de éste. Luego recibió a ”Semito” con quien estuvo reunido durante más de una hora y media. A las 12:45 del mismo día, mandó llamar a Plácido Mico con quien se entretuvo apenas 15 minutos, porque fueron interrumpidos por una llamada de Armengol Ondo. Prometió volver a la prisión al cabo de unas horas al objeto de continuar la conversación, además de la que tenía pendiente con Guillermo Nguema, pero hasta la fecha no ha vuelto a Black Beach.
Al marcharse el DGSP comenzó la agitación. ”Semito” anunció que debía mantener una reunión con todos los presos del ”Caso Ondo Obiang” para darles la información de su entrevista con el DGSP. Esta reunión tuvo lugar a las siete y media y del mismo día y ”Semito dijo a los reunidos que el DGSP le había dicho que la libertad de todos ellos dependía exclusivamente de sus propias manos, ya que por parte del presidente Obiang todo estaba resuelto. Por lo tanto, los presos deberían de escribirle una carta pidiéndole perdón, porque había precedentes al respecto y citó el caso Severo Moto que en 1995 escribió
al Jefe del Estado arrepintiéndose de la falta que había cometido.
No hubo acuerdos, porque los presos querían conocer el contenido que tendría la carta y aclarar si realmente la propuesta procedía del DGSP. La reunión se levantó con el propósito de seguir al día siguiente. No obstante, y ante las dudas sobre la información dada por ”Semito”, Guillermo Nguema Ela se fue al despacho del ACP para informarle sobre el transcurso de la reunión y mostrarle su inquietud por el sesgo equívoco que estaban tomando las cosas, amén de que tenía pendiente un encuentro con el DGSP para hablar del mismo tema, pero con un enfoque diferente. A las siete de la mañana del día siguiente, 26 de junio, en el despacho del ACP, Guillermo Nguema Ela y ”Semito” se dijeron de todo y no llegaron a las manos de puro milagro, porque éste último hacía un relato de la reunión de la tarde anterior que no tenía nada que ver con lo ocurrido con la misma. ”Semito” se presentaba como el defensor de los inocentes y apolíticos, mientras que calificaba a Guillermo como el cabecilla de los que no querían renunciar a la política y con esa actitud trataban de seguir arruinando la vida de unos pobres jóvenes.
En el mismo día se celebró otra reunión en la que los asistentes, después de un largo debate, llegaron a la conclusión de que lo mejor era que el DGSP fuera a Black-Beach para esclarecer su propuesta de escrito, tanto en su contenido como en sus consecuencias, al propio tiempo que reconocían como únicos interlocutores a Guillermo Nguema y a Plácido Mico, y no al llamado ”Semito”.
Sin embargo, el tantas veces repetido ”Semito” se fue al despacho del ACP para informar de la reunión a su manera. Por eso, Guillermo, a su vez, fue a verse con el ACP para trasladarle las conclusiones reales del encuentro. Pero, fueron interrumpidos por una visita al ACP quien dijo a Guillermo que lo llamaría más tarde para proseguir con la charla. Lo sorprendente ocurrió cuando el ACP se presentó en la nave de Guillermo con muy mala cara y con varios folios en la mano, conminándole a que elaborara una lista de sus seguidores, los políticos y los recalcitrantes que no querían salir de la cárcel. En el mismo sentido se dirigió a ”Semito” para que confeccionara la lista de sus seguidores y los apolíticos que solo se interesaban en obtener el perdón del Jefe del Estado y salir de la cárcel.
Sobre la una y media del mismo día, Guillermo y Plácido fueron al despacho del ACP para pedirle explicaciones sobre el tema de las listas e informarle de las conclusiones de la reunión de la mañana. El ACP les dijo que era partidario de que escribieran una carta de perdón al presidente Obiang para conseguir la libertad y profirió amenazas en el sentido de que de no hacerlo, las consecuencia serían graves. Por eso, para saber de una vez por todas si estaban por la labor, decidió convocar a todos los presos del ”caso Ondó Obiang” para conocer quién representaba a quién en la postura de cada cual.
Esta reunión se celebró a las cuatro de la tarde y terminó a las seis y media. El ACP y ”Semito” quisieron imponer el tema de la carta a Obiang y de las dos listas a base de tergiversaciones y amenazas mal disimuladas sobre las consecuencias de una negativa. No se llegó a ninguna conclusión concreta, salvo la petición de que se presentara el DGSP para aclarar cuál de los dos planteamientos, el hecho a Nguema Ela o a ”Semito”, preferían mantener, además de aclarar a quien quería como interlocutores y que es lo qué quería como contenido de la carta.
No volvieron a saber nada de las autoridades de la cárcel hasta las seis y media de la tarde del día siguiente y sólo para comunicarles que el nuevo horario de cierre de puertas de las naves sería a partir de las 17:30.
Se ha sabido que el ACP anduvo aquel día muy furioso porque estaba interesado en la elaboración de las listas y en que los presos hicieran suyas la tesis de escribir al presidente Obiang pidiéndole perdón. Por eso recriminó al grupo de ”Semito” por no haber apoyado resueltamente la idea de la carta comprometiéndose a firmarla en la última reunión.
No se sabe hasta dónde llegarán esta vez con sus amenazas, o cuándo será y cómo la nueva embestida de que serán víctimas los presos, pero en esta angustiosa espera el miedo empieza hacer mella en muchos de los reclusos, con independencia del acoso que los llamados inocentes y apolíticos hacen a los supuestos malos y sobre los que pesa la amenaza de un traslado a otros penales, tal como se hizo con Felipe Ondo Obiang.
NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA. Laureano Ondo Monsuy, condenado por el ”Caso Ondo Obiang” en el macrojuicio de mayo-junio de 2.002, viene desde hace más de seis meses actuando como chivato de las autoridades carcelarias en contra de los demás presos. El citado Ondo Monsuy de 31 años de edad, es natural del mismo poblado que Felipe Ondo Obiang, Oveng, del distrito de Mongomo. Porque en las últimas semanas, juntamente con Marcelo Seme Nse (”alias Semito”) y otros, están siendo los protagonistas destacados en el sentido de colaborar con el Director General de Seguridad Presidencial y el Administrador de la Cárcel Pública de Malabo para conseguir de los presos una declaración autoinculpatoria, paso necesario, según el jefe de la seguridad de Obiang, para la materialización de la gracia presidencial.
En efecto, y bajo el falso pretexto de trasladarse al hospital de Malabo, el Administrador de la cárcel de Black Beach, Numeriano Mangue Ondo, sacó de la misma en la mañana del día 28 de junio a Laureano Ondo Monsuy, pero su destino no era el centro sanitario antes mencionado sino otro y con fines de dudosa confesionalidad.
Fuentes dignas de todo crédito informan desde Bata que Ondo Monsuy fue visto en el aeropuerto de esta ciudad acompañado del administrador adjunto de Black Beach, Ignacio Nvó (alias ”Papi”), cabo 2º de la seguridad presidencial. Las razones de este desplazamiento clandestino obedecerían posiblemente a cumplir una misión secreta a instancias del Director General de la Seguridad Presidencial, Julián Ondo Nkum, y que consiste en trasladarse al poblado de Felipe Ondo Obiang para hacerse con los supuestos poderes mágicos de éste que se esconden, dicen, en la base de un árbol frutal, ABAM, que se encuentra en las inmediaciones de la antigua casa de Ondo Obiang. En este lugar, dice Ondo Monsuy, el líder del FDR suele realizar sus ceremonias brujeriles.
Además, Ondo Monsuy manifiesta que esta información la obtuvo de un curandero recientemente fallecido, Félix Edjang, natural del mismo poblado. En las raíces del árbol de referencia estaría enterrada la placenta de Felipe Ondo Obiang y cuya recuperación por parte del régimen daría lugar a su neutralización, con lo que podría ser eliminado más fácilemte ya sea por brujería o por medios más expeditivos.
Algunas personas han señalado que la misión del preso Laureano Ondo Monsuy y el cabo Ignacio Nvó, podría tratarse, asimismo, de un viaje a Evinayong, ciudad donde se encuentra actualmente encarcelado Felipe Ondo Obiang para atentar contra su vida.
A Laureano Ondo Monsuy se le ha visto en Bata con una abundante cantidad de dinero que le habría sido entregado por el Director de la Seguridad Presidencial.
En otro orden de cosas, el 28 de junio los condenados del ”Caso Ondo Obiang” fueron una vez más, objeto de las amenazas del ACP. Éste les ha prometido, por lo menos, un mes de sufrimientos y de restricciones de libertad dentro del establecimiento penitenciario si persistían en su actitud de no hacer caso de lo que se les recomienda: escribir a Obiang una carta de autoinculpación. Pero las amenazas provienen de la denuncia de Marcelo Seme Nse, Semito, quien se fue al ACP con el cuento de que había sido insultado y amenazado por parte de un presunto individuo del grupo de Guillermo Nguema Ela, que le recriminaría de crear divisiones entre los presos, rompiendo con ello la unidad del FDR
Al cierre de esta noticia se ha sabido que Laureano Ondo Monsuy se trasladó a la Región Continental provisto de una pistola automática. ¿Para qué?
Desde luego, a CPDS no le sorprendió que Ondó Obiang fuera trasladado a la cárcel de Evinayong, toda vez que para el régimen, muy imbuido en los asuntos de brujería, supone una seria amenaza para su poder, sobre todo si la prisión de Black Beach se encuentra, como lo está, a escasos metros de la residencia de Obiang. La verdad es que el país, con unos gobernantes de esta naturaleza, está lejos de caminar hacia la consecución de las libertades y el desarrollo por todos anhelados.
Malabo, 1º de julio de 2003
CPDS, Oficina Central, MALABO
Fuente: CPDS