COMUNICADO
En esta Jornada Mundial de Lucha contra el Sida, CPDS constata con satisfacción que, por fin, hemos pasado en Guinea Ecuatorial de la etapa en que se decía que “el Sida no pasaría por nosotros”, intentando ocultar lo inocultable, a la etapa de reconocimiento de que este azote universal puede alcanzar a cualquiera de nosotros, indiferentemente de sus condiciones materiales.
Esta epidemia galopante afecta hoy día a unos 40 millones de personas en el mundo, de entre los cuales 2,5 millones de niños menores de 15 años; produce 8.000 muertes y 14.000 nuevas contaminaciones cada día, la mayoría de ellas favorecidas por la falta de la debida información. Solamente en este año 2003 se ha registrado 3 millones de muertes y 5 millones de nuevas contaminaciones en todo el mundo.
Africa subsahariana es, de lejos, la región del mundo más afectada. Con solamente el 2% de la población mundial, cuenta con 26,6 millones de personas contaminadas, es decir, el 66,5% de las personas infectadas en el mundo entero. Enorme. Entre éstas, se estima que 4,2 millones necesitan urgentemente tratamiento antiretroviral y solamente 50.000 lo reciben. Para el año 2003, se estima en 2,3 millones el número de muertes causadas por el Sida y en 3,2 millones el número de nuevas contaminaciones en Africa Negra.
En Guinea Ecuatorial se estimaba en el año 1999 que el 5,8% de las personas que pasaban análisis en los principales laboratorios de los hospitales de Malabo y Bata estaban contaminadas, con predominio femenino y el 72% de los casos en la población de 20 a 34 años, es decir, la más activa. Se puede fácilmente deducir que una detección sistemática en la población general hubiera librado cifras superiores. Se ignora la realidad actual de estas cifras, aunque cada uno puede fácilmente imaginarse la tendencia lógica.
Ante la grave falta de información y de educación que vive la población de Guinea Ecuatorial en materia de VIH/SIDA, los altos niveles de promiscuidad sexual y la perversión sin límites de algunas personas que, sabiéndose contaminadas, van propagando voluntariamente la infección, se puede legítimamente temer que la realidad en nuestro país esté alcanzando ya cotas insospechadas y se esté avecinando, quién sabe, de los 40% de las poblaciones de Botswana y Swaziland.
CPDS lamenta la ausencia de transparencia en la gestión y el manejo de la situación y de los datos relacionados con la pandemia, particularmente los relativos a las tasas de prevalencia y de incidencia en la población. Grandes son la angustia y el sentimiento de impotencia de CPDS que lamenta que, en un país en el que no faltan medios, no se le esté dando a esta epidemia la importancia que realmente se merece.
CPDS expresa su más sincero apoyo moral a las personas contaminadas y que viven con el VIH. También expresa su deseo de que la política de importación de medicamentos antiretrovirales que se está implementando, y que tarda mucho en concretizarse, se lleve a cabo, por un lado, velando por la igualdad de todos en el acceso al tratamiento, para que no sean una vez más los más desprovistos los que se queden con las ganas de tratarse y, por otro lado, respetando escrupulosamente la necesaria y debida confidencialidad médica.
Malabo, 1 de diciembre de 2003
LA COMISION EJECUTIVA NACIONAL
Fuente: ASODEGUE