El decepcionado acólito Filiberto Ntutumu Nguema al que el déspota acaba de ofrecer otro pedazo de pastel en su desastroso Gobierno para ocupar el Ministerio de Educación de Guinea Ecuatorial, declara, según publica la página web manipulada por el dictador y su séquito: “los cargos públicos pertenecen a la Administración Pública del Estado y no son posesiones personales”. Puede leerse en el siguiente enlace: http://www.guineaecuatorialpress.com

Analizando profundamente este enunciado, se puede fácilmente llegar a la conclusión de que este servil acólito está decepcionado por el cambio de carteras. Le hubiera gustado continuar al frente del PDGE, para seguir estafando y actuando con total impunidad. Parece que no le ha gustado tanto ese premio de consolación. Pero deberá comprender que los caminos de Obiang no son los suyos, el dictador reparte su herencia, la que le legó su padre, a su antojo. Tampoco debe extrañarle al señor Ntutumu Nguema la actuación de su jefe Obiang, y debe saber que él mismo ha provocado la destitución. Dos causas son los más probables:
a) Los diversos rumores que corrían acerca de su presunto intento de apartarle del poder al sátrapa y por otra,
b) La mala administración de las subvenciones del PDGE, y los fondos de las becas. Que con el dinero de las becas del Estado, el acólito se compró 5 turismos, los mejores taxis de la ciudad de Bata, los cuales, destinó para el servicio de transporte en esta ciudad para beneficio personal.

El muy sinvergüenza, Ntutumu Nguema, que ha sido Secretario General del PDGE durante varios años, en los cuales se ha dedicado a la “venta de becas”, propiedad del estado, ha llegado a su máximo grado de hipocresía y cinismo al afirmar que los cargos públicos son del Estado y no personales, pero bien consciente de que las becas que ha estado vendiendo no eran propiedad personal sino del Estado. Si supiera que las responsabilidades públicas no eran personales, no hubiera actuado como lo había hecho.

Seguimos insistiendo que el hábito no hace al monje. Y aunque la mona se viste de seda, mona se queda. Las cosas malas no son buenas por llevar eslóganes buenos y publicitarios. Nadie desconoce la actuación impune y la calidad estafadora de este señor. Pues esa actitud de demagogia es frecuente, no sólo en Ntutumu Nguema, sino en todo el gobierno obianguemista. Es habitual en ellos utilizar ilustres lemas, como “hacer el bien y evitar el mal”, o nobles frases, como ésta que ha soltado este desfachatado. Todo eso contrasta con la realidad que se vive en Guinea Ecuatorial. ¿Cuántos chicos han pedido becas al PDGE, siendo afiliados a este partido, y no les han sido concedidas?, ¿para gozar de una beca en Guinea Ecuatorial, es necesario ser del PDGE o basta ser ciudadano ecuatoguineano?, y muchas preguntas más. A la persona seria se le mide por los actos y no por las palabras.

Aunque, en realidad, no tenía toda la culpa. La culpa es del absolutista y usurpador de poder, que en vez de asignar directamente las becas al Ministerio tutor, las ha destinado a su partido. La culpabilidad del Señor Ntutumu Nguema, la parte que le corresponde, está claramente en su falta de honradez, transparencia y espíritu patriótico. Si los hubiera tenido, habría sabido administrar dichas ayudas a los estudiantes ecuatoguineanos.

Parece que el gobierno de Guinea y los sumisos que lo sirven tienen un problema de vocabulario. “Beca” significa subvención, ayuda, subsidio, donación, pensión, etc., destinada a los que tienen pocos recursos, en este sentido a los estudiantes que tienen escasos medios para acceder a la educación superior en el extranjero o en el propio país. Por tanto, aquel que la obtiene, se le asigna una cantidad de dinero y unas condiciones por el tiempo que duren sus estudios. No tiene ningún sentido que algo destinado al pobre se lo vendan. ¿Para que vaya a robar? Es recomendable que en cada cosa se utilicen los términos apropiados. Si es por vender la publicidad del partido único o del presidente vitalicio de Guinea para limpiar su imagen, que lo llamen con otro nombre, pero si es para ayuda, que se llame beca.

El desvergonzado Ntutumu Nguema, en su ejercicio al frente del Partido único, no sólo se ha dedicado a la venta de becas, sino que también ha estado cobrando impuestos a todas las empresas que operan en Guinea para financiar el Partido, así como descuentos a los funcionarios, sin su expreso consentimiento. Además de desviar enormes fondos de GeProyets (Guinea Ecuatorial de Proyectos) sin que nadie le exija cuentas. Cosa que en la actualidad no podrá seguir haciendo. Este es el verdadero motivo por el que ha llegado a soltar dicha barbarie. Se duele mucho porque en el Ministerio de educación no se dan oportunidades similares, aunque claro, tendrá otra, la de poder vender nombramientos y la de dejar las aulas de clase sin tiza, ya no hablamos de otra cosa. Actualmente está proponiendo al autócrata Obiang el traspaso de las becas al Ministerio de educación, lo que él nunca propuso cuando ejercía de Secretario General ni hubiera aceptado en su época.

Ahora con la rabia que tiene se lo pagarán los profesores. Es probable que en los próximos días haya recortes en sus salarios para seguir engrosando sus cuentas personales. “Obras son amores y no buenas razones”. Si considerara el cargo que ostentaba como estatal y al servicio de los hijos del Estado, lo hubiera demostrado; de lo contrario, al considerarlo como su merito personal de servidumbre a Obiang, no pudo hacer otra cosa que dedicarse a la venta de becas.

En esos momentos de angustia, por la pérdida irreparable de sus grandes ingresos, que atraviesa el cínico Filiberto Ntutumu, le acompañamos de corazón y le decimos ¡¡¡ENHORABUENA señor vendedor de becas!!!

Ruperto María Mondong Oyono Mifumu
Portavoz Estudiantes GE




Fuente: Estudiantes GE

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