LA POLÍTICA ESPAÑOLA ENTRE EL PEREJIL Y LA PALMERA.
O P I N I Ó N
Confieso mi incultura geográfica, la otra se supone. No conocía donde estaba la isla ¨Perejíl¨; pero me consuela saber que la mayoría tampoco sabían de su existencia.
Todos hemos quedado perplejos ante la invasión a cargo de 7, otros dicen que 12, gendarmes, soldados o lo que sea, marroquies. Han instalado sus tiendas, una o dos, y han izado la bandera. Todavía no sabemos si una o dos.
Ese acto, seguro que no va a ser el único, coincide con la boda del Rey alauita. Puede ser un regalo que quiere hacer a sus súbditos, que no ciudadanos. Así, con seguridad, se olvidan de sus estómagos y de otros problemas. Ya se sabe que el ardor patrio calma o merma los instintos vitales, pues todas las energías se dedican a gritar, avociferar contr contra alguien.
Ifni, Sáhara, pesca, retirada de embajador.. han terminado, de momento, en este grave incidente. Ni más ni menos que la toma de un territorio español, aunque sea del tamaño de un campo de fútbol.
Y ahora ¿qué hacer? La cosa está complicada. parece ser que las islas Chafarinas -esas si que se donde están- puede ser el próximo territorio que tomen las tropas del Ejército Marroquí.
A nadie se le escapa que a nuestros aliados franceses y norteamericanos siempre les ha venido muy bien ¨contribuir¨ a que Marruecos o quien sea nos pueda debilitar. Eso no lo puede discutir nadie a estas alturas.
Si nuestro Ejército no ha desalojado de forma inmediata a esos invasores, ahora el asunto se va complicando. Los barcos de unos y otros se arremolinan como en una feria; pero, por suerte, el agua no llegará a los tejados. Ahora vienen períodos de negociación, entre los que no se escaparán las presiones de empresarios.
No hay que olvidar que Marruecos es el primer país que recibe ayuda de nuestra Cooperación. Ya se sabe, créditos FAD, ayudas de todo tipo y color, para que las empresas (pocas y de amigos) reciban suculentas tajadas.
Que si en España hay 300.000 marroquiésm que si atraviesan el solar patrio más de un millón y medio de trabajadores de Marruecos nuestro país todos los años, que si somos el segundo cliente, etc., etc... Son las disculpas que ha tenido que poner nuestro flamante ministro de Presidencia.. Hay que ir al grano: la acción les ha pillado desprevenida, no se han enterado. Cuando lo acontecido acontece, no han sabido reaccionar.
Vaya con nuestro moderno Centro Nacional de Inteligencia, se las cuelas que da gusto. Nuestros desunidos servicios de inteligencia -en cada embajada hay dos o tres que dependen de distintos cuerpos- no atinan mucho que se diga últimamente.
Los políticos, bien pertrechados en el arte de la Oratoria, intentarán quedar bien com el pueblo; pero lo cierto es que esta acción de Marruecos ha sido vergonzosa. Con lo contento que estaba Aznar, por el gol que había metido al PSOE, sobre todo con la candidatura de ALBERTO RUIZ GALLARDÓN. Y ahora resulta que el moro, le viene a aguar la fiesta.
El Perejíl, ya veremos si lo recuperamos; pero lo que es la moral, esa nos va a costar un poco.
Y ahora la Palmera. Nos imaginamos a TEODORO OBIANG NGUEMA, íntimo colaborador de Marruecos en todo lo habido y por haber, regodeándose de esta acción que él, de otras formas, suele hacer. Los hombres de la Seguridad de Obiang entran y salen de los aeropuertos españoles, armados o con lo que sea, sin ningún problema. Sin embargo, de todos es conocido el largo peregrinaje a base de trabas y trabas que tienen que pasar los policías españoles que van destinados a la Embajada en Guinea, o los que han pasado los escoltas de los Presidentes españoles que han visitiado Guinea.
¿QWué decir de las pobre monjitas y curas? o de las largas espoeras de empresarios y profesionales que, en la mayor de las veces, eran acusados de ser posiblemente teroristas que iban a desestabilizar el sistema político de la República de Guinea.
Un poco de seriedad señores. Seiedad, aplomo, buen saber y decisión, son algunas de las actitudes que debemos pedir a nuestra clase política.
La permisividad que se tiene con Marruecos rebasa ya todos los límites de la paciencia. Y qué decir de la que se mantiene con OBIANG. Ëste hace y desface a su antojo; sin embargo España le premia con nombramientos de Doctor Honris Causa, medallitas, le permite entrar y salir sin problemas y, sobre todo, le da cobertura diplomática para que se pasee por media Europa.
Todo esto nos huele a chamusquina, a algo que se quema. Carecemos de fuerza ante los desmanes de Marruecos y Guinea Ecuatorial -aunque la distancia y la problemática sea muy distinta-, pero, sin embargo, destinamos enormes cantidades de dinero a esos paises a través de Cooperación que en la mayoría de los casos no van destinadas a favorecer a las poblaciones de esos dos países.
Intercambios y relaciones de todo tipo, cuantas más mejor; colabroación, la más leal y mejor; ayuda, toda, pero controlada y destinada a la población. En contrapartida, nuestro Gobierno debe exigir el cumplimiento de esa reciprocidad en todo; además de respeto a los Derechos Humanos y salvaguardia de los intereses españoles aquí y en Marruecos y Guinea Ecuatorial.
Eugenio Pordomingo
Madrid, 12 de julio de 2002.
Fuente: adecugui
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