DÍA MUNDIAL DE LA LIBERTAD DE PRENSA
COMUNICADO DE ASOPGE
La Asociación de la Prensa de Guinea Ecuatorial, ASOPGE, se une hoy con todas las organizaciones del mundo que promueven y defienden la Libertad de Prensa, para homenajear el 3 de Mayo, Día Mundial de la Libertad Prensa, efeméride nacida de la vocación de Reporteros Sin Fronteras y reconocida por las Naciones Unidas, a través del Consejo Económico y Social y la UNESCO.
Nuestra Asociación es la única organización que promueve y defiende, a duras penas, la instauración de la prensa independiente en Guinea Ecuatorial, país con un sistema político basado en la opresión, la persecución de los profesionales de prensa y la violación sistemática de los derechos fundamentales de los ciudadanos, lo que ha motivado que hasta la fecha, doce años después de la histórica Declaración de Windhoek de 1991, sobre el Fomento de una prensa Independiente, Libre y Plural en África, nuestra labor se vea suspendida por inimaginables obstáculos, para un país que constitucionalmente reconoce el pluralismo político, la democracia y la libre búsqueda y difusión de opiniones.
No menos deplorable, resulta para la ASOPGE la complicidad que al respecto se nota en ciertas organizaciones del Sistema de las Naciones con oficinas en Guinea Ecuatorial, que en los últimos años han claudicado ante los tentáculos de la dictadura del general Teodoro Obiang Nguema, en el poder desde 1979, y a ojos vistos, están violando sutilmente los postulados de la Declaración de Windhoek que insta que “toda financiación debe estar encaminada a fomentar el pluralismo así como la independencia. En consecuencia, esa financiación debe concederse a los medios de comunicación públicos únicamente si las autoridades garantizan, en el plano constitucional y de manera efectiva, la libertad de información y expresión y la independencia de la prensa”.
Igualmente, exhorta que “para fomentar y consolidar los cambios positivos que se producen actualmente en África y para contrarrestar los de carácter negativo, la Comunidad Internacional, los organismos de desarrollo y las asociaciones profesionales deberían, como cuestión prioritaria, destinar recursos financieros al desarrollo y la creación de diarios, revistas y otras publicaciones periódicas no gubernamentales que reflejen tanto la sociedad en su conjunto como los diferentes puntos de vista de las comunidades a las que prestan servicios”.
Sin embargo, después de 1991, período que coincidió con la proclamación de la democracia plural en Guinea Ecuatorial, los voluntad de pequeños grupos profesionales que se comprometieron a instituir una prensa independiente y libre siempre han sido infructuosos, minados por trabas gubernamentales, por una parte; y por otra, porque no han tenido suficiente respaldo de las organizaciones competentes como las agencias del Sistema de la ONU establecidas en el país que, sin embargo, prefieren orientar su colaboración en materia de prensa con un Gobierno, cuyos excesos de poder y amordazamientos a periodistas y demás ciudadanos que intentan hacer uso de la libre expresión, son hartos conocidos por las organizaciones pro derechos humanos y de la libertad de prensa, como lo prueba el reciente informe del Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la promoción y la protección de la libertad de opinión y de expresión, Ambeyi Ligabo, que visitó el país a finales del año 2002.
Hoy, en los países democráticos se conmemora el décimo tercer aniversario de la Libertad de Prensa, pero desde casi 1999 está prohibido en Guinea Ecuatorial por los depredadores, que no toleran la existencia de la prensa independiente, ni periódicos profesionales. Los pequeños órganos estatales, pro-estatales y de algunos profesionales sumisos, salen con excesiva irregularidad y con una cobertura si no nula, pero insignificante, cuya cobertura sólo se limita en el casco urbano de la capital, Malabo. Tampoco existen medios de impresión modernos, ni los periódicos están dotados de los instrumentos elementales para facilitar una labor periodística eficaz y profesionalizada.
En la actualidad ningún sólo periodista de la prensa independiente ejerce en el país, porque han tenido que exiliar o camuflarse en el interior del país por temor a represalias, mientras la dictadura ha clausurado la única asociación de prensa, acusada de actuar como un “gobierno paralelo”. Para distraer a la opinión pública y seguir corrompiendo las ayudas al desarrollo, el régimen ha nombrado al frente de ASOPGE una directiva a su imagen y semejanza, compuesta por los profesionales de la prensa estatal y algunos sumisos, que en esos momentos libran una batalla propagandística de lavado de imagen únicamente para sustraer fondos y confundir a la opinión pública sobre la aguda crisis de las libertades de prensa, de expresión y de opinión que se registra en el país hace 34 años.
Si el espíritu de la Declaración de Windhoek sigue siendo el Fomento de una prensa Independiente, Libre y Plural en África, la ASOPGE aprovecha una vez más esta jornada Mundial de la Libertad de Prensa para reiterar su petición cerca de las organizaciones del Sistema de las Naciones Unidas, concretamente la UNESCO, el PNUD y el FNUAP, que suspendan todo tipo de cooperación bilateral con el Gobierno guineano en materia de los medios de Comunicación Social y se cancele los fondos destinados al respecto, hasta que mediante acciones concretas se comprometa a garantizar la seguridad de los periodistas, restaurar el funcionamiento de la Asociación de la Prensa de Guinea Ecuatorial y modificar sustancialmente la actual Ley de Prensa, Imprenta y Medios Audiovisuales.
La ASOPGE considera, como lo reconoce las demás organizaciones y la propia Naciones Unidas, que la libertad de prensa y un gobierno abierto son vitales para la democracia y la justicia, por lo que es ilógico pensar que una dictadura, cuyo único fin es tener bajo control todos los medios que permitan a los ciudadanos participar en el debate público pueda algún día suprimir el monopolio y favorecer la existencia de una prensa independiente, libre y plural, a no ser mediante presiones de los donantes de fondos y la abolición de leyes liberticidas, como se ha registrado en países africanos donde la prensa ha logrado importantes mejoras tras la Declaración de Windhoek.
Con veinticuatro años de poder omnímodo, los actuales gobernantes de Guinea Ecuatorial siempre han reaccionado con brutalidad y criminalidad contra el nacimiento de la prensa independiente. Así lo prueba la desaparición en 1996 del primer periódico independiente El Sol, sólo duraró dos años. En 2000, hizo lo mismo con el periódico La Opinión. Paralelamente, no ha mostrado el más mínimo interés en promocionar y modernizar los propios medios estatales, tanto impresos que audiovisuales, que permanecen hasta la fecha con unas estructuras obsoletas que sólo promueven el narcisismo político y la propaganda ideológica.
La ASOPGE expresa su reconocimiento y se solidariza con las organizaciones internacionales de promoción y defensa de la libertad de prensa, y todos aquellos medios de comunicación social e instituciones que durante décadas han venido contribuyendo en la difusión y denuncia de la grave situación socio política que sufre la sociedad guineana.
Animamos y expresamos nuestro sincero reconocimiento a todos los profesionales de la prensa de Guinea Ecuatorial que durante los últimos años han guiado sus esfuerzos para la instauración de la prensa independiente, libre y plural. Las libertades no se otorgan, sino se conquistan, por eso nuestro sincero reconocimiento a los profesionales que, pese al hostigamiento, presiones físicas y psicológicas, siguen creyendo y trabajando para la puesta en marcha de una prensa independiente.
Finalmente, reiteramos cerca del régimen, de la sociedad guineana y de la comunidad internacional, nuestro firme compromiso estatutario de promoción y defensa de la libertad de prensa en Guinea Ecuatorial. La ASOPGE no se detendrá ante la amenaza, la intimidación y la persecución, hasta que no sean restaurados sus derechos en base los presupuestos jurídicos recogidos en el ordenamiento jurídico del país y en los diversos instrumentos internacionales que regulan la libertad de prensa, de opinión y de expresión.
MALABO, 3 DE MAYO DE 2003
POR LA LIBERTAD Y LA SOLIDARIDAD DE LA PRENSA
EL CONSEJO DIRECTIVO, PRESIDENCIA DIRECCIÓN.
Fuente: ASOPGE
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