EFE/BURGOS


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El secretario general del Partido de Convergencia para la Democracia Social de Guinea, Plácido Micó, pidió ayer la mediación de España ante la Unión Europea y la ONU para que haya control internacional sobre las elecciones previstas para dentro de cinco meses en el país africano.

Micó, que pronunció en Burgos una conferencia sobre las posibilidades de democratización de Guinea, afirmó que «las elecciones serán fundamentales para la apertura democrática de Guinea, que tras dejar de ser una colonia española hace 35 años ha pasado por la dictadura de Macías y desde hace 24 años sufre la dictadura de Obiang».

El líder de la oposición guineana aseguró que, pese a la legalización de trece partidos políticos en Guinea en 1992, sigue sin haber democracia y la vulneración de los derechos humanos es una constante del régimen guineano.

«Las autoridades periféricas y la junta electoral nacional acuerdan el porcentaje de votos y el número de escaños para el partido de Obiang sin considerar para nada los resultados de las urnas, mientras dejan que algún partido de la oposición obtenga también alguna representación testimonial», explicó Micó.

Tras acusar al resto de partidos de la oposición de colaborar con el régimen de Obiang, Micó recordó que hace año y medio se produjo en este país centro africano una persecución con detenciones, torturas y juicios que eran una farsa y acabaron con el encarcelamiento de los acusados, entre ellos el propio Micó, que fue liberado de la cárcel hace dos meses.

El secretario general del partido de la oposición democrática guineana recordó que Guinea es un país con 28.000 kilómetros cuadrados de extensión y sólo 500.000 habitantes que, tras su proceso de independencia, sostenía su economía en un 80% con ayudas de la comunidad internacional.

Sin embargo, a mediados de los 90, la aparición de petróleo cambió radicalmente la situación del país, que ha tenido crecimientos anuales hasta del 80%, y del cien por cien del Producto Interior Bruto.

«Precisamente, el hecho de que haya una riqueza petrolífera notable hace que haya cambiado la postura política de muchos países, que no quieren enfrentarse al régimen de Obiang para intentar sacar tajada», afirmó Micó.

Fuente: El Comercio DIGITAL (10.10.03)

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