Sigo llamando la atención sobre lo que Guinea sigue y seguirá conociendo este siclo infernal de tentativas de insurrecciónes que, por supuesto hay que condenar, porque este maravilloso país no lo necesita.
Como Gabonés, ”alfa y omega” de la política gabonesa de estabilización de mi subregión, y sufriendo el dolor de que Guinea quiera caer en la desgracia, vuelvo a llamar la attención al presidente y padre Teodoro Obiang Nguema y su gobierno sobre lo que haya un verdadero aperturismo político en su territorio.
Que no basta la solidaridad entre Guinea y Gabon con vista a los eternos arrestos a sus hermanos guineanos residentes en Gabon. Esto no solucionará in fine los problemas que conoce un país que, con todas estas riquezas vive una situación de continuo estado de emergencia, como si estuviesemos en tiempos de Macías Nguema. ¿A ver qué pasa padre Obiang? Trate de aliviar un poco la situación de su país, padre mío. Porque le conozco y sé que puede conseguirlo. Que no sa haga usted engañar por algún pirómano que pone el fuego a la vez que grita ”el fuego!”. Sea perspicaz hasta dentro de los que le rodean y que ya no le quieren, pero que quieren aprovechar las aguas turbias para pezcar.
Este presidente Bongo que sigue ”ayudándole” allí, mire como está en calma con los suyos. Mire cómo estamos en calma relativa en Gabon, a pesar de las dificultades económicas que hemos conocido, y que en nuestro país existen divergencias políticas.
Nosotros, por unos motivos propios, que nos sentimos muy ligados a Guinea, ya estamos a punto de explotar de rabia, al tener conocimiento de estas miserables actuaciones en Guinea.
En vez de contar siempre con tantos arrestos o eliminación anticipada a todos sus adversarios, trate de emprender otra forma de gestión de la adversidad que su poder está sufriendo.
Y para los súbditos guineanos. A ver que verguenza están librando al mundo. No sólo están mostrando su incapacidad de cohesión y solidaridad entre ustedes (¿dónde está Mba Abessole hoy en Gabon?) para trabajar por el desarrollo de su país, sino quieren tocar siempre donde ni los medios ni el espíritu les pueden permitir conseguir algo.
Ni Obiang Bikó, ni nadie, puede acabar con Obiang. ¿Y por qué acabar con Obiang, si mañana Guinea será peor?
Pues como buen conocedor de los asuntos guineanos y solidario a este país, no tengo ni tendré miedo ni verguenza en gritar sobre ustedes. Nunca, nunca me cansaré. Porque al fin y al cabo estaré allí como muchos para apagar el fuego...

Del que les ama a todos.
Jean Noel NZUE ONDO. Academia Militar de Saint-Cyr Coetquidan, Francia.

Fuente: Jean Noel Nzue Ondo Nguema

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