Esta es la información recogida por la agencia AFP
(AFP 21/08/2004)

El gobierno de Zimbabwe se ha negado a extraditar a los 70 supuestos mercenarios hacia Guinea Ecuatorial, donde se quería juzgarlos por haber fomentado un golpe de Estado contra el régimen de Malabo, según informó el sábado el diario The Herald.

Según el períodico, el rechazo a la extradición fué anunciado por el ministro de Interior de Zimbabwe Kembo Mohadi, a la salida de un encuentro el viernes entre una delegación guineana y el presidente Robert Mugabe, que le habría transmitido la petición de extradición de parte de su homólogo guineano Teodoro Obiang Ngema. ”Entregaron (los delegados) mensajes especiales al presidente (Mugabe) de parte del presidente Nguema y uno de ellos era que quería la extradición de los supuestos mercenarios hacia Guinea, a lo que nosotros respondimos que eso no era posible ya que sería contrario a las normas internacionales”, declaró M. Mohadi, según cita The Herald.

Los 70 hombres, de diferentes nacionalidades pero que poseen pasaporte sudafricano, fueron detenidos el 7 de marzo en el aeropuerto internacional de Harare donde su avión hizo escala para cargar armas de la compañia de armas de Zimbabwe. Según las autoridades de Zimbabwe, debían unirse después a los 15 supuestos mercenarios -detenidos al mismo tiempo en Malabo y cuyo proceso está previsto que se inicie el 23 de agosto (hoy N.T.)- con la intención de derrocar al presidente guineano. Pero ellos afirman por su parte que iban para la República Democrática del Congo (RDC) para proporcionar seguridad a las minas de diamantes.

Zimbabwe añadió recientemente a Guinea en la lista de países hacia los cuales puede extraditar a sospechosos. Pero según los juristas, citados por The Herald, la extradición de esos 70 supuestos mercenarios no es posible porque la Ley entró en vigor después de las detenciones (La ley no se puede aplicar con efecto retroactivo N.T.).

La justicia de Zimbabwe no preve el procesamiento de crḿenes cometidos fuera del territorio nacional. Por tanto no se pronunciará sobre las acusaciones de complot contra el régimen de Malabo, sino solo sobre las violacionaes a las leyes de Zimbabwe sobre la seguridad, las armas, la inmigración y la aviación que aferctan a esos hombres.

La continuación del proceso, retrasado hasta el 27 de julio por un tribunal especial de Harare, fué señalado el viernes para el 27 de agosto, después de escuchar las requisitorias y las peticiones de abogados.

Los abogados de la defensa pidieron la liberación de la mayor parte de los acusados debido a que desconocían totalmente lo del cargamento de armas previsto en Harare.

Si se les reconoce culpables, podrían ser condenados a 10 años de cárcel.

Las familias y los defensores tenían el temor de que esos hombres fueran extraditados y juzgados en Guinea Ecuatorial, donde podrían haber sido condenados a la pena capital.
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Recordemos que hace poco, Obiang declaró en una entrevista en la revista Jeunne Afrique L´Intelligent del 2 de agosto, que no iba a pedir la extradición de los mercenarios de harare
http://www.lintelligent.com/gabarits/articleJAI_online.asp?art_cle=LIN01084obiannoitid0
J.A.I. : Comptez-vous réclamer l’extradition des soixante-dix mercenaires arrêtés au Zimbabwe, à l’issue de leur procès ?

T.O.N. : Nous n’avons pas, à Malabo, de prison de haute sécurité susceptible d’accueillir ces soixante-dix hommes. Surtout que nous détenons déjà quatorze de leurs complices, arrêtés sur place par notre police. Nous sommes donc convenus avec le président Robert Mugabe que chacun jugerait en quelque sorte « ses » mercenaires, même si le but de ces hommes était identique. Ceux de Harare sont jugés à Harare, ceux de Malabo le seront à Malabo.

J.A.I. : Pas d’extradition, donc ?

T.O.N. : Non, non. Je ne la demanderai pas. Ce serait trop complexe à mettre en œuvre.

Decía claramente que no había en Guinea una cárcel de seguridad y que cada país iba a juzgar a sus propios detenidos. ”Era demasiado complejo poner en marcha la extradición”.

No hace de esto ni un mes y Obiang ha enviado al Ministro del Interior guineano a pedir la extradición, olvidandose una vez más que las extradiciones no las llevan los jefes de gobierno o de estado, sino que es un proceso judicial en el que los gobiernos solo cooperan con los jueces. Eso se le ha dicho miles de veces y en lugar de dejarlo en manos de jueces guineanos, envía a su ministro a ”recoger a los prisioneros” como si fuera la cosa tan simple.

También dijo Obiang en esa entrevista que los detenidos en Malabo no serían condenados a muerte porque no llegaron a ejecutar el intento de derrocamiento, pero visto que Obiang siempre falta a lo que dice, es posible que sean condenados a muerte los que vayan a ser juzgados en malabo.

El juicio en Malabo comenzará sin los detenidos de Harare, contrariando los deseos de Obiang de juzgar a todos juntos. Otra contrariedad de Obiang es que Zimbabwe no ha juzgado la supuesta intentona golpista porque el hecho que se juzga (más bien el intento) se iba a desarrollar fuera de Zimbabwe. Ya debía saberlo Obiang y sin embargo insiste.

Acostumbrado a hacer las cosas sin seguir la Ley, cree que en Zimbawe Mugabe tiene los mismos comportamientos. Mguema Mba también le hizo saber a Mugabe que se le invitaba a visitar Guinea. Mugabe no será tan tonto de ir a Malabo, donde todo es posible, máxime ahora que las cosas le están saliendo mal a Obiang por todos los lados. Malabo no es seguro ni siquiera para los presidentes africanos. Mugabe nunca debió negociar con Obiang sobre cosas imposibles y Obiang está enfadado. Por primera vez, alguien le ha engañado a Obiang, lo mismo que acostumbra a hacer a todos.

Celestino Okenve


Fuente: AFP, Jeunne Afrique y propia

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