”Yo creo que estoy aquí porque yo era el vicepresidente de Triple Option” comenzó Agustín Masoko su declaración y luego añadió que había otros accionistas en Triple Option, entre ellos Armengol Ondo Nguema, delegado nacional de la seguridad, general (analfabeto) y hermano directo del jefe de estado teodoro obiang nguema.

Agustín disertó durante tres cuartos de hora presentando hechos que ponían de manifiesto la irregularidad de su detención y su inocencia.

Explicó también que hace tiempo informó a la policía ciertas irregularidades que observó en un viaje en el que estuvo con Nick a Sudáfrica y al parecer la policía no le hizo caso.

Luego le detuvieron y le estuvieron presionando para que implicara a dos personas, dos ministros que citó.
En ese momento se le mandó callar, se le prohibió continuar y se cerró la comparecencia de hoy.

Los jueces estaban temiendo por sus vidas. El juicio no está acorde a los standards internacionales. Parece que es un puro trámite.

Hasta ahora no hay ninguna prueba salvo las declaraciones de Nick du Toit. Un testimonio que, a falta de otras pruebas, no significaría nada para los jueces de un país que tuviera independencia judicial. El testimonio no es prueba de peso en ningún sitio, salvo las pruebas materiales. Y eso tiene lógica pues cualquiera puede inventar un cuento y eso no serviría para condenar a nadie, ni siquiera para enjuiciar. De hecho, los jueces debían haber cerrado el caso antes del juicio, por la ausencia de evidencias materiales. pero no ha habido juez instructor en este proceso, un grave vicio de forma.

Ante una acusación cuyos supuestos autores pertencen a tantas nacionalidades, en un escenario mundial y con tan graves implicaciones internacionales, la declaración de una persona reconociendo estar implicado en el intento de golpe es simple y llanamente irrelevante. Hacen falta pruebas de peso. Esperemos que el fiscal Oló las traiga: grabaciones de conversaciones, fotografías de reuniones y viajes, facturas y transferencias, armas, etc. Elementosque incluso con el silencio de Nick, llevarían al convencimiento lógico de que hubo intento, abrumadoras pruebas. Menos no puede ser porque se piden penas de muerte y prisión por muchos años. No se puede seguir matando ni encarcelando de forma alegre.

Hace falta algo más. Un juicio no es algo banal. Obiang debe aportar pruebas irrefutables del intento de echarle del poder por la fuerza.

Obiang dijo que habría un juicio decente. Pues no es decente ni serio mandar callar a alguien mientras declara, salvo que esté hablando de marte o de júpiter.

Celestino Okenve Ndo
Foro Solidario Por Guinea Ecuatorial



Fuente: AFP

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