La suspensión sine die de la parodia de Juicio que desde el pasado día 23 de agosto se viene celebrando en Malabo contra supuestos mercenarios acusados de planear una tentativa de golpe de Estado contra el régimen de Teodoro Obiang Nguema, nos permite hacer una evaluación del mismo atendiendo a las peticiones de nuestros simpatizantes que se quejan por no conocer la posición de RENAGE al respecto.

Los que siguen la evolución política de nuestro país recordarán que la historia del golpismo en Guinea Ecuatorial en los 25 años de poder absoluto de Teodoro Obiang Nguema, es una estrategia premeditada del régimen para amedrentar y amordazar no sólo a los adversarios políticos, reales o imaginarios, sino y a la población en general en un intento claro de perpetuarse en el poder. Es en este contexto donde hay que situar el nuevo espectáculo circense que se presenta en el ”anfiteatro” de Banapá.

La fobia psicopática de Teodoro Obiang Nguema a posibles golpes de Estado está llevando a su régimen a inventar continuamente supuestas acciones desestabilizadoras del país que están siendo hasta ahora fruto de su imaginación. Obiang ve enemigos por todas partes y como se sabe, « el que teme debe ». Podemos afirmar con toda rotundidad que en Guinea Ecuatorial no ha habido de facto una tentativa de golpe de Estado. Todo está siendo unos montajes para desviar la atención tanto del pueblo como de la comunidad internacional de los verdaderos problemas que tiene el país.

Como decimos, el espectáculo circense sobre una supuesta invasión mercenaria en Guinea Ecuatorial se monta precisamente en el momento en que el Senado americano ha abierto una investigación sobre las cuentas privadas de Obiang y su familia en el Riggs-bank de Washington DC así como de otros actos de saqueo y despilfarro del patrimonio nacional. Por otra parte, la Subcomisión de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas acaba de publicar un informe condenatorio al régimen de Obiang sobre la violación sistemática de los derechos humanos en Guinea Ecuatorial. Amnistía Internacional también se ha pronunciado en los mismos términos en su último informe sobre la situación de los derechos humanos en nuestro país. Las fraudulentas elecciones legislativas del pasado mes de abril tampoco le han servido para nada apesar de la aceptación por CPDS de los dos escaños que le fueron atribuidos.

Para salir de esa embarazosa situación, Teodoro Obiang Nguema y su régimen necesitaban un balón de oxígeno y de ahí, la invención de una nueva intentona golpista sacada de la manga y que ahora le sirve de espada y escudo para defenderse de esas graves acusaciones. El fracaso está siendo monumental porque las « pruebas » presentadas por la acusación son tan oscuras como la misma historia de los mercenarios lo que sin duda ha llevado a la suspensión sine die de ese espectáculo.

Una referencia muy importante que queremos hacer es que las Instituciones del Estado de Guinea Ecuatorial y concretamente los poderes legislativo y judicial no están cumpliendo con sus obligaciones. La Cámara de los Representantes del Pueblo (el Parlamento) no se ha reunido desde la constitución de su Mesa. Creemos y así lo manifestamos en su día que el Parlamento debía haberse reunido para esclarecer el tema del Riggs-bank constituyendo como se lo pedimos a su Presidente una Comisión de investigación sobre estos hechos. Por otra parte, el Parlamento no ha movido ni un solo dedo interpelando tanto al Ministro del Interior como el de Justicia para que se pronuncien sobre la supuesta tentativa de golpe de Estado en la que están implicados no sólo ciudadanos extranjeros sino y nacionales. Pues, esa inacción del Parlamento sólo se explica como lo hemos manifestado en anteriores ocasiones, por la dependencia de los demás poderes del Estado al Poder Ejecutivo, es decir de Teodoro Obiang Nguema.

Sobre el juicio de Malabo ya se ha dicho bastante y ridículo es cada vez mayor. A Obiang le gusta ver correr sangre inocente y es por eso que ha implicado en esta rocambolesca historia a cuatro compatriotas. Obiang nunca está contento si no mata y para justificar sus asesinatos, tiene que inventar un golpe de Estado. Esta es la única conclusión que podemos sacar de esta parodia de juicio que se ha montado de nuevo en Malabo.

Nosotros exigimos la puesta en libertad de todos los acusados ante la falta de pruebas determinantes que justifican la existencia de un plan para derrocar al Teodoro Obiang Nguema. Si no existen tales pruebas, tampoco puede haber juicio y es lo que se está constatando a lo largo de todo este proceso.

Yaundé, a 02 de septiembre de 2004

La Coordinación Interina de RENAGE



Fuente: Coordinadora Interina de RENAGE

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