Obiang y sus acólitos deben dejar a Unión Popular en paz

27 de Agosto de 2009.-

Muchos creen que cualquier llamamiento que se haga a Obiang Nguema Mbasogo para que vea lo que debe ser correcto, es perder el tiempo. Estoy casi a punto de alinearme con esta tesis, casi una ley, si me dejo guiar por la historia larga de irracionalidades y crímenes acaecidos en Guinea, que no hubieran podido suceder si Obiang hubiera sido persona que escucha y reflexiona. Obiang presume de no hacer caso a nadie, ni a su mujer, ni a sus hijos ni a sus parientes cercanos ni a los pocos ministros que se atreven a aconsejarle. No hablemos de la indiferencia con que acoge los consejos de los demás gobernantes y líderes mundiales.

En el año 1991, Obiang Nguema hizo aprobar una reforma de su propia constitución. Con esa reforma, la lógica indicaba que terminaba en Guinea Ecuatorial el régimen de partido único y se abría paso al multipartidismo, es decir, en teoría el país entraba en una etapa de democracia. Eso indicaba la lógica.

Pero en la práctica, Obiang inauguraba uno de sus muchos espectáculos circenses, en este caso tener multipartidismo con un régimen de partido único y tener democracia dentro de una férrea dictadura. Este juego de falseamiento no procedía sólo de la mente de Obiang. Bongó y otros autócratas del Africa Central buscaban con ese ingenio frenar los cambios que los africanos llevabamos tiempo exigiendo. Obiang entendió la lección de los dictadores centroafricanos, pero como alumno aventajado -que lo es para todo lo que es fraude y maldad- le dió mayor uso a la estratagema, quizá porque en los primeros eventos electorales se dió cuenta de que no contaba con el apoyo de la población y por su carácter maliciosamente perverso.

En efecto, a pesar de la ausencia real de unas libertades plenas en el país, la Plataforma de Oposición Conjunta POC, ganó las elecciones municipales de septiembre de 1995, si bien como sabemos, Obiang negó a la oposición los resultados obtenidos, en lo que fué el primero de los grandes fraudes electorales que acompañarían la falsa democracia en el falso estado de Guinea Ecuatorial, falsamente dirigido por el falso presidente Obiang Nguema.

De los muchos partidos que decidieron inscribirse en la falsa transición a la democracia, estaba Unión Popular, cuyos dirigentes máximos Andrés Moisés Mba Ada y Justino Mba Nsue fueron acusados falsamente de intentar dar un golpe de Estado. Esta acusacion, con los efectos que siguieron, fue utilizada para apropiarse de los bienes de la empresa que ambos dirigentes de UP erigieron en Guinea con fondos procedentes de España -obtenidos de un préstamo- y para castigar violentamente a los seguidores de ambos líderes, fusilando en el evento teatral a un pobre soldado que nunca se enteró de lo que estaba pasando. También fueron asesinadas otras personas cercanas a Andrés Moisés como el oficial Pedro Motú Mamiaga.

Estaba claro que Obiang y su gente no iban a jugar limpio. No pensaban dejar que el poder pasara a manos de los que fueran elegidos por el pueblo guineano. La forma de evitar perder el poder era bastante demoníaca: en lugar de declarar que aquello era una dictadura y no se permitía la puesta en entredicho de esta situación por parte de nadie, optaron por crear falsas instituciones de una falsa democracia donde ellos, cada cierto tiempo, escenificarían unas supuestas elecciones que eran afirmaciones brutales del poder dictadorial, verdaderas puestas en escena del poder único, perfectamente orquestadas para que todos los guineanos se enteraran de que Obiang era el único que tenía el mando.

Nadie entiende que hubiera que crear toda esta parafernalia para ser dictador.

En España, Franco fue dictador. Dijo claramente que no se admitían los partidos políticos, pero permitía cierto juego político dentro de su partido único llamado Movimiento Nacional, con un modelo político dictatorial conocido como democracia orgánica. Había unos órganos constituidos en esa democracia orgánica que seguían unas normas dictadas por Franco, normas que todos cumplían incluyendo al mismo Franco, normas que no eran democráticas puesto que fueron dictadas sin reflejar la voluntad libremente expresada por la mayoría de la población. Había un parlamento del dictador donde las familias políticas de la dictadura, Iglesia y Falange Española fundamentalmente, se movían en un estrecho margen pero participaban en la democracia orgánica de Franco. A nadie se le ocurrió pedir la inclusión del partido socialista en la democracia orgánica. A nadie se le ocurrió pedir la inclusión de la oposición democrática que luchaba contra la dictadura de Franco, que era de corte fascista y nacionalsocialista (NAZI). Digamos que las cortes de Franco eran un parlamento de un solo partido y los debates, cuando los había, se hacían dentro del partido único Movimiento Nacional.
La coherencia de este modelo de partido único era completa. Franco era jefe de Estado, Jefe del Movimiento Nacional y jefe de Gobierno, aunque con el tiempo fue delegando la función de jefatura de gobierno a un ministro, el Subsecretario y luego vicepresidente del gobierno, en la figura de Carrero Blanco. Los derechos de los españoles no existían como tales. Franco regaló algunos derechos a los españoles y eso es lo que se conoció como Fuero de los Españoles. En España no hubo una constitución porque no emanaba del pueblo y Franco no jugó nunca al engaño. Lo llamó claramente FUERO, un derecho otorgado por el monarca, a su capricho. Y que sin embargo cumplió.

Todo lo contrario es lo que hace Obiang y sus amigos dictadores del Africa Central.

Si Obiang quiere tener el poder toda su vida en Guinea y ahorrar mucho sufrimiento y muerte a los guineanos, es mucho más simple anunciar que no tolera la democracia, debe decir que no hay partidos ni elecciones y que su poder es indiscutible.

Obiang quiso en 1991 que afloraran los partidos para descubrir a los líderes ocultos que tenía el pais y así poder exterminarlos. Así ha exterminado a las personas más dinámicas de nuestro país y eso es un signo claro de que Obiang prepara para Guinea un futuro sin pena ni gloria, un futuro de indignidad y de esclavitud como parece que estamos siendo abocados.

De lo que quedara tras los exterminios del activismo de la militancia de los partidos, Obiang buscaría esclavizar a los otrora líderes de los partidos, ahora sin seguidores, mediante su compra y su inserción en una famosa COALICION GUBERNAMENTAL. Así se remataría el teatro de una democracia falsificada con un gobierno y un parlamento monocolor que incluiría unos partidos vacíos integrados en la pomposamente llamada Coalición Gubernamental. Incluso podría insertarse en ese parlamento monocolor a uno o dos diputados de un partido ”radical”, que adormaría la supuesta democracia no ya dictatorial sino terrorista (porque siembra el terror).

Pero este juego diabólico no iba a funcionar con el partido Unión Popular. No al menos al completo sin presentar batalla.
Hemos sido objeto de todo tipo de atropellos, divisiones, ilegalidades, desde los tiempos en que nuestros máximos líderes fueron expropiados de sus bienes y acusados de preparar un golpe de estado, fusilando a un simpatizante del partido, en 1981, fecha en que entonces no habia oficialmente partidos politicos.

UP no tiene grandes amigos en el exterior, no tiene recursos económicos. Pero tiene unos recursos importantes en forma de militantes convencidos. Es cierto que muchos militantes han abandonado la lucha frontal contra una tiranía que asesina con la tortura y con el hambre. Pero seguimos conservando un espíritu reivindicativo puro.

Algunos, pocos, de nuestros militantes sin escrúpulos, han actuado como quintacolumnistas para intentar llevarnos al redil de los corderos de Obiang. Obiang no esta contento con sus falsas elecciones, con el fraude tantas veces escenificado sin rubor. No le basta saber que va a ganar unas elecciones sin garantías. Quiere hacerlo teniendo además a todas las personas humilladas formando parte de su bloque de coalicion gubernamental.

¿Cree Obiang que la gente es estúpida y no sabe que su democracia es una absoluta basura y sus elecciones son un fraude absoluto?. Si la gente lo sabe ¿Es que Obiang se traga sus propias mentiras y esta convencido de que es presidente porque ha sido elegido por el pueblo? Si es así, Obiang no está bien de la cabeza. Hasta un niño sabe que Obiang es un presidente del fraude que nunca juega limpio y que gasta mucho dinero en espectáculos de ficción cuyos resultados se conocen antes de tiempo.

Y esto ya es el colmo de una conducta anómala. En principio las cosas se hacen para conseguir unos objetivos. Si Obiang quiere gobernar toda su vida sin tener en cuenta la opinión de la gente gobernada ¿Por qué no deja de meterse con un partido que no puede competir porque el escenario no es de libre competencia política? ¿Qué más quiere Obiang si ya tiene todas nuestras riquezas, todas nuestras voluntades suprimidas y todos humillados rindiéndole tributo como si de un dios se tratara?

Obiang debe dejar en paz al partido Unión Popular. Su intervención siempre será negativa. No puede aconsejar a nadie sino preparar una trampa para destruir al verdadero UP. Obiang no es nadie para hablar con las supuestas facciones de UP, siendo que esas facciones sólo existen por su demoníaca acción.

Si Obiang quiere ser creible, debe despedir a su ministro del Interior. Si no lo hace, que se mantenga alejado de UP y que no nos cree más problemas. Bastante tenemos con tener una dictadura perversa para que encima se dedique a crear problemas a un partido que intenta mantenerse a flote en un entorno tan difícil.

El dia 7 de febrero del 2008 el ministro del Interior, en la más pura ilegalidad, notificó a Faustino Ondo que el juez José-Tomás Engonga le había suspendido de sus funciones de presidente del partido. La notificación debería haber sido hecha por EL JUEZ al PARTIDO para darle la opción de elegir a otro presidente provisionalmente y además la decisión subvertía los principios del interés general porque se dejaba a nuestro partido sin dirección, siendo que un partido es una institución del Estado -he dicho bien, el partido es una institución del Estado aunque dudo que Obiang entienda esto-. En un estado real por supuesto, no el estado de opereta que dice Obiang que gobierna. (1)


Desde noviembre de 2007 hemos estado pendientes de la resolucion judicial definitiva, que sospechamos que no se va a producir jamás, para elongar hasta el infinito nuestra situación de decapitación.

Los militantes de UP, los verdaderos militantes, mantienen, mantenemos, nuestro rechazo más rotundo a las maniobras perversas de la dictadura. Los que encabezan los intentos de Obiang por destruir a UP, deben saber que sus acciones son delictivas y que serán juzgados cuando en nuestro país haya una justicia verdadera. Eso como poco.

Daniel-Dario Martínez Ayecaba y su equipo representan hoy por hoy a la verdadera UP, la que nunca va a ser fagocitada por el dictador. En varias ocasiones hemos tenido ocasión de elegir esa opción como la que mayoritariamente apoyamos y sin embargo el dictador sigue metiendo sus manos en UP.
Lo de Obiang es enfermizo.


Celestino Okenve Ndo (Nvo e´ Zang Okenve Mituy)

Coordinador de UP en la Unión Europea
Profesor de la Universidad Politécnica de Madrid

(1) En cualquier otra parte del mundo ningún juez suspende al máximo líder de un partido, salvo que éste pierda sus derechos políticos a consecuencia de una pena impuesta por un delito común. Las notificaciones se hacen además al partido y no a una persona, porque es el partido el que ha elegido a la persona y debe tener la posibilidad de recurrir, pues toda decisión judicial es revisable en primera instancia y por instancias superiores.
Además, el principio de interés general implica que el juez, en todo caso, a la hora de decidir, suponiendo que necesariamente deba decidir sobre la continuidad del órgano elegido por un partido que se guia por sus normas internas, debe hacerlo menoscabando lo menos posible EL INTERERS GENERAL. El interés general en este caso es el interés común, el interés de la sociedad, que indica que no es bueno que una institución tan importante como un partido se quede sin dirección. Esto quiere decir que lo normal es decidir la continuidad de los órganos elegidos hasta que haya sentencia..y no al revés como se hizo. Lo cual indica que lo que se hizo se hizo con muy mala fe y violación de principios básicos del derecho.
No debió de admitirse a trámite la demanda interpuesta por un militante (Osa Mokong) contra la decisión de la convención de UP, porque este militante no recurrió primero a los órganos internos del partido, que eran la primera instancia, agotando esa vía. El juez, además de actuar fuera de la ley como se ha visto, decidió unas medidas precautorias -suspensión de la presidencia de UP- que no se aplican en estos casos, volviendo a violar la ley en sus principios. Y finalmente el dejar en suspenso un proceso judicial relativo a la organización de un partido -institución del Estado- durante mas de año y medio es una muestra clara de los mecanismos fraudulentos que los falsos órganos juridiccionales de Obiang utilizan con excesiva frecuencia.

Fuente: propia

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