A la dictadura guineana le gusta sembrar vientos y recoger tempestades, y es su gran baza fuerte jugar al despiste cuando se roban millones del País. No es la primera vez, ni será la última, que cuando Obiang y sus ministros quieren trasportar maletines de dólares a paraísos fiscales traigan un extravagante tema que mueva las emociones, despiste a la opinión pública y paliativa el dolor de los guineanos. Para ser un ladrón profesional, hay que saber engañar y para engañar, hay que tener habilidad para sorprender y eso, el Gobierno de Guinea Ecuatorial lo hace muy bien. Cuando se empieza una nueva obra, se firma un nuevo acuerdo, se lanza un nuevo mensaje de patriotismo y condenando al colonialismo, se sabe de ante mano que es una estrategia para llevar millones y millones fuera del país.

Hace bien poco, y ya lo intuíamos, que las estrategias de acusar a Iberia eran pura fachada y una estrategia más de robo y escamoteo del gobierno de Guinea Ecuatorial a su pueblo. El clan acaba de desviar otros 130 millones de dólares a paraísos fiscales, fuentes fiables.

Vicente Ehate Tomi salió con una rocambolesca historia acusando a Iberia de trato discriminatorio a los ciudadanos de Guinea Ecuatorial con amenazas incluidas, de reducir de tres a un vuelo semanal si no rebajaba el precio del pasaje y no cambiaba sus modos y formas hacía los ciudadanos de Guinea Ecuatorial que a su juicio, Iberia los daba un trato racista.

Van dos semanas, y todo sigue igual, Iberia sigue con sus desorbitados precios, el trato racista continúa; ya que nada ha cambiado, el ministro se ha reservado en sus amenazas, y al pueblo de Guinea Ecuatorial no se le han comunicado nada. O sea lo de siempre, el paripé, puro teatro. Ya nos parecía excesivo que a la dictadura le preocupara el sufrimiento de sus ciudadanos, cuando es la primera causa causante de los sufrimientos de sus ciudadanos.

Nuestra opinión la que siempre mentemos, lo que siempre hemos dicho aquí, que éste gobierno está para robar y llevarse el dinero fuera del país, ningún guineano les interesa, y nunca hay motivos humanos para apoyar una dictadura y más todavía la del clan Mongomo, porque son los primeros que odian a los guineanos. No nos cansaremos de repetirlo y los hechos hablan por sí solos. Y algunos, se permiten el lujo de escarnecerse de los guineanos sin pagar precio elevado por ello.


Fuente: propia

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