LOS RESPONSABLES DE LA SEGURIDAD NACIONAL DEL RÉGIMEN DE OBIANG, CONVOCAN A PLÁCIDO MICÓ ABOGO SECRETARIO GENERAL DE CPDS, PARA RESPONDER DE LA ACUSACIÓN DE PARTICIPACIÓN EN UNA REUNIÓN PARA DAR UN GOLPE DE ESTADO.
A las catorce horas de la tarde (hora local de Malabo) de hoy miércoles día 17 de abril, el Secretario General de Convergencia para la Democracia Social, D. Plácido Micó Abogo, ha comparecido ante el Ministro Delegado para la Seguridad Nacional, D. Manuel Nguema Mbá, previa citación escrita, fechada el mismo día y firmada por Sr. Ministro Delegado, en la que se decía requerirle “para la aclaración de ciertos extremos de un asunto que se sigue”.
En la citada comparecencia, acompañaban al Ministro Delegado para la Seguridad Nacional, el de Interior y Corporaciones Locales, D. Clemente Engonga Nguema Onguene y el Director Nacional de la Seguridad Presidencial D. Julían Ondó Nkumu y un inspector de policía. También hicieron entrar a un señor, que fue presentado como César, (supuestamente hijo de D. Felipe Ondó). A la pregunta del Ministro Delegado sobre si Sr. Micó conocía al llamado César, aquel respondió no conocer al referido César. Este a su vez dijo no haber tenido trato alguno con Plácido aunque sí podía reconocerlo en la calle como tal.
Una vez que el referido César fue requerido para que repitiera las acusaciones que hacía contra Plácido Micó, dicho señor manifestó, que:
“En un día del año 2001, en pleno día, llegaron a la casa de Emilio donde vivía su padre Felipe Ondó Obiang, para mantener una reunión con estos dos primeros, Julio Ndong Elá, Guillermo Nguema Elá, Lorenzo Ondo y Plácido Micó acompañado de otro de su partido, cuyo nombre no conocía, pero que podía identificar. En dicha reunión, Felipe explicó el plan para dar un golpe de estado en Mongomo en el día de las fiestas del 12 de octubre, para lo que ya contaba con gente preparada, entre militares y otros. Después, tomó la palabra Plácido, quien opinó que no era una buena idea llevar a cabo el golpe en Mongomo y propuso que Felipe hiciera venir a Malabo a los militares reclutados para ejecutar el golpe en Malabo, donde sería más fácil y eficaz evitando las muchas muertes que podrían ocurrir si tal operación se hacía en Mongomo en plenas fiestas con el gran número de personas que allí estarían. La propuesta fue aceptada, se levantó el acta de la reunión que fue firmada por todos y se la guardó Julio”.
Al ser preguntado por la fecha o al menos el mes en que tuvo lugar la supuesta reunión, el llamado César dijo no saber, y ante la insistencia de Plácido Micó, sobre este aspecto, fue interrumpido por los asistentes para decirle que no había sido llamado para interrogar al llamado César sino más bien para descargar y explicar sobre la acusación contra él formulada.
Ante tamaña acusación fruto de un montaje inventado por agentes del régimen, el Secretario General de CPDS, negó rotundamente haber participado en cualquier reunión en casa de Felipe, señalando que sólo en una ocasión, en el mes de abril de 1.998, cuando recién traídos de Gabón, fueron puestos en libertad Felipe y Guillermo, ocasión en que fue a saludar al primero, a las 19 ó 20 horas, aproximadamente; y que, desde entonces nunca ha vuelto a llegar a dicha casa, siendo imposible que hubiese estado en reunión alguna en la misma.
Respecto del segundo hombre de CPDS, el ¨acusador¨, no acertó ni a describirlo ni ha dar su nombre. Sin embargo, manifestó poderlo reconocer si le fuera presentado, para a reglón seguido, ante la pregunta del Ministro de Seguridad, afirmar que se podría tratar de Jesús Elá Abeme; pero resultaba que durante más de cinco minutos el señor César había tenido sentado frente a frente al aludido Jesús Elá Abeme, en la antesala del Ministro de Seguridad, y no fue capaz de decir que el señor de la antesala era precisamente la segunda persona de CPDS, con lo que se estaba demostrando una vez más el montaje, si bien, las autoridades no quisieron insistir en este punto, dada la confusión en que se estaba sumiendo su hombre.
A la pregunta de dónde se celebraban y cuantas fueron las reuniones entre FDR y CPDS para la fusión de estos partidos y que se decía en las mismas, Plácido Micó contestó que dichas reuniones se celebraron en la sede del partido y que no se trataba de una fusión de dos partidos sino de un pacto de cooperación entre varias fuerzas políticas (CPDS, FDR, UP, PSD, ADP), que fue llamado FOD. Además, todas aquellas reuniones y la firma del documento final de las mismas, tuvieron lugar cuando el Secretario General de CPDS, estaba en el extranjero.
Después se le preguntaron por si creía que era normal que un partido político legalizado firmara pactos de fusión con otros partidos ilegalizados, a lo que contestó que, era necesario distinguir entre un partido ilegalizado y uno en vía de legalización, o que al menos la ha instado; en cuyo caso, los acuerdos de cooperación política que pueda suscribir con otros partidos no tienen por qué ser ilegales, siendo en cualquier caso acuerdos privados sin vinculación a la Administración. Además, como antes había dicho, nunca se trataron de reuniones de fusión de FDR y CPDS, si no reuniones para formar la FOD, una coalición de los partidos: CPDS, FDR, UP, PP, DSD y ADP. Ante la insistencia de las autoridades en conocer los que participaron en dichas reuniones, dijo el Sr. Micó que había que preguntarlo a cada partido puesto que el no se encontraba en el país cuando se celebraron las referidas reuniones.
Tras el interrogatorio arriba descrito, que fue recogido por escrito, se firmo la correspondiente declaración. Acto seguido, el Ministro Delegado para la Seguridad Nacional, le comunicó verbalmente a Plácido Micó, que debía permanecer en el país sin viajar al extranjero, a la espera de que se esclarezcan los hechos en el juicio que en breve se llevará a cabo.
ALGUNAS VALORACIONES.
1ª.- CPDS cree que esta nueva situación creada por los agentes del régimen, se inscribe dentro de una estrategia del PDGE y su gobierno, de ilegalizar a CPDS, así como “sacar de circulación¨ a algunos de sus dirigentes, empezando por su Secretario General.
2ª.- Con la estrategia anterior se pretende que las próximas elecciones presidenciales tengan lugar sin la concurrencia del único partido de oposición al régimen, actualmente existente en el país, así como distraer la atención de la comunidad internacional sobre sobre dichos comicios a la vez que se mantiene a la población en un clima de intimidación.
3ª.- También debe tenerse en cuenta el que con la acusación inventada contra Plácido Micó, se esté pretendiendo apartarle, como abogado que es, de que pueda asumir la defensa de cualquiera de los detenidos en el juicio que se va a llevar a cabo contra ellos. Resulta plausible que si algunos de los detenidos, ahora que se está instruyendo el sumario, hubieran manifestado su voluntad de ser defendidos por el abogado Plácido Micó, los agentes del régimen utilicen la excusa de su supuesta implicación en los hechos para descartarle como defensor.
4ª.- La estrategia del régimen a la que nos hemos referido en el punto 1, puede estar materializándose al verse el régimen libre de la presión de la comunidad internacional.
Fuente: La Diáspora/CPDS
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