Ya que Juan Carlos Ondo Angue me tiene bloqueado por whatsapp como consecuencia de mis críticas sobre sus actuaciones, aprovecharé este espacio público para hacer una pequeña reflexión sobre los últimos acontecimientos relacionados con él. Ahora bien, los que siguen de cerca el arte de la política internacional, se acordarán del vídeo que se hizo viral donde Xi Jinping se enfada con Justin Trudeau por revelar sus conversaciones privadas. En la cultura china sobre la guerra, como muchos de ustedes habrán leído a través de las numerosas obras del estratega chino Sun Tzu, “El buen general debe ser discreto y reservado, no revelando tus intenciones, fortalezas o planes hasta el momento adecuado”, sobre todo, cuando fuiste parte del sistema. Como persona pública que es Juan Carlos Ondo Angue, es moralmente cuestionable lo que todos hemos visto en el vídeo.

También tienes el derecho de exigir en los tribunales la reparación del daño que han hecho a tu imagen. Sin embargo, has demostrado ante la opinión pública que eres una persona que no sabe guardar secretos ante los encantos de una mujer desconocida. Sun Tzu dice que un buen general es el sostén del éxito de un proyecto que pretende conquistar un territorio. El fragmento donde apareces revelando los supuestos planes para derrocar a Obiang con el apoyo de un supuesto financiador (sea cierto o no), ha dejado claro que, no mereces la confianza de nadie.

El escritor estadounidense de origen judio dice “no puedes comprometer a un grupo a meterse en una causa contra un enemigo odiado por todos cuando tú eres una persona débil que no guarda secreto”. La grave imprudencia de Juan Carlos Ondo Angue es el reflejo del fracaso de todos los proyectos políticos que surgieron con la intención de derrocar a Teodoro Obiang: LA ELOCUENCIA, el principal enemigo del ecuatoguineano. Cuando se dice que Obiang es originario de Gabón, será por algo, él supo interpretar las sabias orientaciones de Sun Tzu, preparando su ascenso al poder sin tanta elocuencia. Él conoce la debilidad del ecuatoguineano: La mujer y el alcohol. Lucas Nguema Esono Mbang, por instrucciones de Obiang, consiguió grabar a Salvador Ondo Ncum y otros (Fiscal General, etc), mientras les ofrecía alcohol y estos revelaban los supuestos planes para derrocar a Obiang.

Ahora bien, como represalia, Juan Carlos Ondo Angue publicó ayer la conversación telefónica privada entre él y un presunto proxeneta camerunés afincado en Francia, Pierre Ngomo Matip. Además de dejar constancia que, él graba las llamadas que recibe (imprudencia), Juan Carlos pretende (es mi opinión) minimizar el grave daño que ha causado a las personas que confiaron en él para liderar el supuesto proyecto político, publicando como una especie de revelación, que Teodoro Nguema Obiang está presuntamente detrás de la muerte de “Abuelo Lima”.

Sea cierta o no, tendrá sus consecuencias políticas en el momento adecuado la extremada revelación que hace el supuesto camerunés, sobre el presunto asesinato de Abuelo Lima. Pero muchos se preguntarán ¿por qué haber esperado 3 meses para publicarlo?. Os lo explico: ¿Ustedes se acuerdan de la información (en principio cuestionable) que circulaba en las redes sociales sobre las presuntas reuniones extraoficiales entre Juan Carlos Ondo Angue, su madre y una cúpula de ML3RGE con los Obiang?. El contenido de esa información era extremadamente preocupante, “estaban negociando recuperar sus bienes a cambio de retirar la denuncia en España por secuestro y torturas”. Pregunta, ¿el intermediario era Pierre Ngomo Matip?.

Conclusión: En mi opinión, el supuesto proxoneta, Pierre Ngomo Matip, conocía perfectamente a Juan Carlos Ondo Angue en los círculos donde sólo ellos sabían dónde frecuentaban. Para captar la atención de Ondo Angue, Pierre le contó una historia (sea cierta o no) que hiciera a Juan Carlos confiarse e incluso llegando a pedirle los dos teléfonos de Teodorin. Como en todos los servicios secretos del mundo, se utilizó la herramienta más peligrosa para capturar a una presa que en el mundo del espionaje llaman: Trampa de Miel.

Él mismo aceptó que le metieran una mujer en la cama, porque pensó que Pierre Ngomo Matip se había convertido en su amigo por confiarle secretos sobre Teodorin, cuando todo era realmente una puesta en escena, una táctica muy utilizada en la guerra de guerrillas, “cuéntale a tu enemigo los secretos de su enemigo para ganar su confianza y caerá”. Por tu imprudencia, pudieron haberte hecho cualquier cosa.

Lo dicho, no vales para un proyecto serio.

Feliz 2024.
Mocache Massoko
Es mi opinión