Para conocimiento de todo el que estuviera interesado, la Oficina Nacional del PDGE tiene el honor de transcribir el discurso íntegro pronunciado por el Hermano Militante Obiang Nguema Mbasogo, el pasado día 19 de enero, con ocasión de su Investidura como Presidente de la República de Guinea Ecuatorial para los próximos siete años:
¨Compatriotas Ecuatoguineanos,
Señoras y Señores:
Con el solemne juramento que acabo de prestar ante Dios y ante mi Pueblo, en su fórmula jurídica-constitucional sacrosanta, de servir fielmente a la Nación, a la Constitución y a las Leyes, unido al hecho concreto de haber sido elegido popular y democráticamente por el Pueblo como Presidente de la República, en las votaciones del día 15 de diciembre del 2002, me consagro hoy de nuevo como el primer Servidor del Pueblo de Guinea Ecuatorial, en la orientación, dirección y ejecución de la política que guiará los destinos históricos de la Nación durante los próximos siete años.
Cuando el Pueblo de Guinea Ecuatorial ha decidido masivamente renovar su voto de confianza en mi persona, a pesar de la concurrencia de otros Candidatos, ha sido indudablemente por su convicción y experiencia de largos años de convivencia, durante los cuales he trabajado coco a codo con este Pueblo, para forjar una efectiva reconciliación nacional de todos los Hijos de este País.
Efectivamente, hemos trabajado todos juntos, para defender la independencia y soberanía estatal, contra aquellas corrientes que todavía intentan subyugar de nuevo al Pueblo libre; hemos luchado todos juntos, para defender la unidad nacional, la integridad territorial y el Estado de Derecho en la República de Guinea Ecuatorial, a fin de asegurar la justicia, la paz y la convivencia armoniosa de nuestro Pueblo.
Hemos trabajado codo a cado con el Pueblo durante los últimos años, para defender nuestros derechos políticos, económicos, sociales y culturales, contra todas las adversidades naturales y contra las tentativas de los enemigos que nunca aceptaron nuestra genuina evolución.
En fin, estimados Compatriotas, hemos trabajado todos juntos y lo seguiremos haciendo, para luchar contra el subdesarrollo y la pobreza en nuestro País y garantizar un futuro próspero a las presentes y venideras generaciones.
Por tanto, la elección de mi persona por el Pueblo de Guinea Ecuatorial no debe sorprender a nadie, porque ella es el fiel reflejo de su voluntad y de su conciencia. Evidentemente no es una victoria personal, atribuida simplemente a mis cualidades personales, sino que es una victoria merecida del propio Pueblo de Guinea Ecuatorial que ha comprendido que la labor iniciada está todavía inconclusa y de que cualquier otra persona no sabría llevarla a cabo sino su autor fundamenta.
Por tanto, aprovecho esta oportunidad para expresar mi más profundo reconocimiento, gratitud y respeto al Pueblo de Guinea Ecuatorial, por su comprensión y apoyo con el que me he identificado durante los años de mi mandato, al que prometo solemnemente seguir trabajando en estrecha armonía y confianza, y que nunca jamás defraudaré.
Pues, es así que esta victoria electoral no está justificada por criterios de división, violencia o empleo de fuerza, odio o maldad contra alguien, ni oposición o exclusión de grupos.
He sido elegido por el Pueblo como un Jefe de Estado que se ha esforzado continuamente por aglutinar al Pueblo y ser su fiel portavoz y representante legitimo de sus intereses.
Por tanto, he sido elegido así, masivamente, por este Pueblo, naturalmente soy y seré siempre Presidente de todos los hijos de este País y no de un Partido Político, de un grupo de individuos, de una tribu, etnia, distrito, región, credo o religión.
La victoria del Pueblo es una victoria para la estabilidad política de la Nación, para la seguridad nacional en todos los dominios y para la promoción de todos los derechos del noble Pueblo de Guinea Ecuatorial, que son sus aspiraciones legitimas e inalienables.
Todos sabemos que los Estados de África, en general, y los de África Central en particular, son hoy los más expuestos a las diversas amenazas de conflictos dolorosos, a los actos de destrucción y a todo lo que se puede calificar como terrorismo político. Nuestro Continente debe superar esta crisis con estrategias internas propias que refuercen la unidad y cohesión de sus Pueblos.
En el caso concreto de nuestro País, Guinea Ecuatorial, que cuenta con inmensos recursos naturales, provoca evidentemente la codicia y las tentaciones de los enemigos, internos y externos, quienes poseen medios colosales capaces de encender el fuego de la guerra, de la discordia y de la destrucción de nuestro tejido social.
Sería nuestra unidad interna, nuestra cohesión y nuestra solidaridad como Pueblo y Nación las únicas armas para impedir esta ingerencia y cualquier tentativa que socave nuestro proceso genuino y pacífico.
Estimados Compatriotas:
La presencia entre nosotros de eminentes Estadistas y representantes de Gobiernos africanos y de países amigos que han venido a compartir con nosotros esta victoria, es una evidencia de la amistad sincera, el respeto y el apoyo solidario de que goza nuestro País en el contexto africano e internacional, así como un claro reconocimiento de nuestro genuino proceso democrático, que se está madurando en paz, orden y respeto de la dignidad del Pueblo de Guinea Ecuatorial.
A quienes damos la más cálida bienvenida a Guinea Ecuatorial, en cuya tierra pueden considerarse como la propia suya.
Os agradecemos, Excelencias y queridos Hermanos, y os expresamos nuestro sincero reconocimiento por este apoyo político y moral que siempre habéis dispensado a nuestro País; pues, la victoria de la República de Guinea Ecuatorial es una victoria de todo el Continente Africano y de cada uno de sus Estados Miembros.
Estimados Compatriotas:
En cuanto al programa del nuevo Gobierno, y con la misma contundencia, firmeza, objetividad y fidelidad con las que he jurado llevar mis responsabilidades, todas las acciones de mi Gobierno solo se encaminarán para satisfacer las necesidades del Pueblo y de la Nación ecuatoguineana.
Es dentro de este orden de ideas y en el espíritu de una continuidad de las de las acciones que todos hemos emprendido juntos que, el dialogo político y la concertación con todas las fuerzas políticas del País deben mantenerse y proseguirse, en el interés de la paz, unidad nacional, reconciliación de todos los ciudadanos y para el desarrollo nacional en todos los sentido, propiciando, si así me lo permiten los Partidos Políticos de la oposición, un debate general sobre el Estado de Derecho de Guinea Ecuatorial, en los aspectos de la legalidad vigente y de la convivencia nacional, a fin de dar más credibilidad y respeto a las normas de cohabitación de los grupos que constituyen el mosaico etno-cultural de nuestro País, así como a la justa y equitativa administración de los recursos económicos que deben beneficiar a toda la Nación.
Contemplamos una Guinea Ecuatorial respetuosa con la dignidad del Hombre y el Estado de Derecho, donde la justicia, la Ley, la firmeza de las Instituciones del Estado y el sistema democrático nacional y el respeto de los Derechos Humanos del Pueblo deben recibir el apoyo solidario y coordinado de todos los integrantes de nuestra sociedad.
El nuevo Gobierno debe traducir en realidad el deseo de ver a Guinea Ecuatorial con infraestructuras sólidas, capaces de mantener una economía nacional sostenible y duradera que satisfaga las necesidades y anhelos del Pueblo. Este es el momento en que debemos diseñar y materializar la nueva Guinea Ecuatorial del Tercer Milenio.
Tengo la convicción de que podemos lograr este objetivo, desde la evidencia de una paz interna que resulta del acervo cultural y las posibilidades de mejorar la gestión de la Administración del Estado, unido al rápido crecimiento económico experimentado por el Pueblo y trabajando en la unidad, solidaridad y en torno a unos objetivos definidos.
Para ello, lanzo un llamamiento a todos los ecuatoguineanos para que, como nunca, trabajemos en equipo, en solidaridad y en una unidad de criterios, a fin de garantizar la seguridad nacional y ciudadana, en el sentido de que no surtan los desordenes, y que sea respetado el Estado de Derecho.
Dentro de este orden de consideraciones, mi sana voluntad es trabajar muy estrechamente con todos los grupos políticos, en el marco de un Gobierno de unión nacional, sin distinción de opciones políticas, etnias, tribus, distritos, regiones, credos, etc... para acabar así, por todas, con los complejos y los radicalismos injustificados de ciertos Partidos Políticos que se automarginan, por las presiones que reciben del exterior, dando lugar a posibles inestabilidades internas.
Debemos continuar con los esfuerzos ya emprendidos para consolidar nuestro sistema democrático nacional, preservando los moldes positivos de la cultura tradicional; pues, solo a través de una democracia liberal podremos acabar con las exclusiones, los rechazos y las intolerancias que alimentan las actitudes destructivas como son el odio, la envidia, la venganza, los triunfalismos y las persecuciones.
No es tan importante que se nos elogien o critiquen desde el exterior, puesto que la vida del Pueblo se desarrolla aquí en el interior del País.
Se dice vulgarmente que: “cada maestrillo con su librillo” o lo que es lo mismo: “cada pájaro con su nido”. Guinea Ecuatorial desea vivir su propia experiencia, siempre que resuelva los deseos y ambiciones de su Pueblo.
En este sentido, las críticas vertidas gratuitamente desde el exterior contra mi País, son a nuestro juicio infundas y carentes de lógica. En nuestro País, lo que prima es la soberanía nacional que el la voluntad del Pueblo expresada en las urnas. ¿Qué dirían ahora de mi elección como Presidente de la República que ha sido casi con la totalidad del electorado?
A pesar de estas críticas, estamos muy orgullosos de nuestro sistema democrático nacional. Nuestro Parlamento, durante la antepasada legislatura estuvo constituido por cuatro grupos parlamentarios, mientras que en la actualidad cuenta con tres grupos representativos de las Fuerzas Políticas.
A todo ello, cabe resaltar que, este parlamento ha desarrollado debates parlamentarios liberales que superan a parlamentos pluralistas de muchos países, en los que se ha cuestionado, interpelado y presentado mociones de censura al Gobierno que se dice tener la mayoría parlamentaria. Consecuentemente, ha habido reformas políticas y de Gobierno por exigencias de nuestra Cámara de los Representantes del Pueblo.
En conclusión, Excelencias y estimados Compatriotas, la democracia la hace el Pueblo para sí mismo y no para terceros y debe desarrollarse conforme a la evolución de la sociedad.
El anhelo del Pueblo es la paz, el progreso socio-económico y el bienestar. No queremos una paz que se impone simplemente por razones de seguridad, porque ella es ficticia. Queremos una paz que resulte de la plenitud del Hombre en el goce de todos sus derechos y libertades, porque de ella resulta la mejor garantía de seguridad, tanto la nacional que la de la propia ciudadanía.
Una paz no la defiende solo el Gobierno, debe ser el esfuerzo de todas las Instituciones del Estado, las asociaciones religiosas, profesionales, los organismos no gubernamentales, la sociedad civil y la población en general, a quienes invitamos, cada uno desde la responsabilidad que le corresponda, a fin de promover una cultura de paz en la sociedad, que implica “hacer el bien y evitar el mal”.
Debemos impulsar la política de igualdad de oportunidades entre todos los Hijos de Guinea Ecuatorial, en general y entre los Hombres y las Mujeres en particular, a fin de que todos participen y contribuyan en el proceso del desarrollo nacional y en el mantenimiento de la paz social.
Las mujeres, al igual que los jóvenes, como grupos menos favorecidos en la sociedad, deberán recibir una atención especial del Gobierno, a fin de integrarlos en la dinámica general del desarrollo social.
El Gobierno deberá esforzarse en mejorar la calidad de los servicios sociales que presta al pueblo, introduciendo reformas, mejorando las infraestructuras, así como capacitando al máximo los recursos humanos, a fin de que la educación, la sanidad, vivienda, el suministro de agua potable, alimentación, tratamiento del medio ambiente y otros, alcancen su nivel superior y se dispensen por igual a todos los ecuatoguineanos, con especial atención en las clases más vulnerables y desprotegidas, como los niños, ancianos y los discapacitados.
La Administración Pública, como encargada de prestar todos estos servicios a la población, debe ser la primera en alcanzar su nivel óptimo de funcionamiento, sin lo cual la prestación de estos servicios nunca podría dispensarse en la forma deseada al Pueblo.
El sistema de prestación de servicios de la Administración Pública a los administrados debe simplificarse al máximo, a través de mecanismos que eviten el centralismo y el exceso de la burocracia, a fin de que los particulares obtengan, en el tiempo deseado y con menos condiciones, los permisos gubernativos que les permitan coadyuvar al desarrollo de la Nación.
Nuestro mayor deseo es mejorar cada día la calidad de vida, tanto de los ecuatoguineanos como de los extranjeros que residen en el territorio nacional, mediante la consolidación del Estado de Derecho, que tiene por misión garantizar a todos los ciudadanos los mejores servicios públicos, la satisfacción de todas sus necesidades en materia de justicia y, sobre todo, asegurar la igualdad de todos ante la Ley.
Esto no se puede conseguir si el País no alcanza las máximas cotas de gobernabilidad, o lo que es lo mismo el funcionamiento óptimo y coherente de todos los poderes y demás órganos del Estado.
A este respecto, conviene señalar que en el Estado democrático de Guinea Ecuatorial, el Gobierno, la Cámara de los Representantes del Pueblo y el Poder Judicial, están íntimamente ligados mediante disposiciones legales emanadas de la Ley Fundamental y demás Leyes, cuya observancia es indiscutible como principio de seguridad jurídica, que garantiza a los ciudadanos la certeza y confianza de que sus representantes y gobernantes actúan bajo los criterios de justicia, legalidad, el respeto, el deber moral y el sentido dela responsabilidad.
En este sentido, como Institución que vela por administrar la justicia al Pueblo, la Corte Suprema de Justicia y todos los demás órganos jurisdiccionales del País, con el apoyo de las demás instituciones del Estado, deben emprender todos los esfuerzos a su alcance, para que las conclusiones y recomendaciones retenidas por la reciente Conferencia Nacional sobre la Administración de Justicia en Guinea Ecuatorial sean implantadas en su integridad, a fin de que el actual estado de paz y de desarrollo socio-económico reciba el apoyo o la seguridad jurídica necesaria que consoliden esta paz y desarrollo socio-económico.
Una sociedad sin un mecanismo fiable dela Administración de Justicia, no puede asegurar la paz ciudadana, ni mucho menos el orden social.
Estimados Compatriotas:
En cuanto al programa de desarrollo económico, el Gobierno seguirá propiciando apoyo y facilidades a la inversión del capital, tanto nacional como extranjero, diversificando los sectores que reciban dicha inversión. En este sentido, felicitamos las nuevas perspectivas que se vislumbran para la expansión de la inversión en los sectores claves dela economía nacional.
Dentro de este orden de ideas, la inversión para diversificación y fomento de la producción agropecuaria recibirá la mayor atención del Gobierno, por ser un sector que absorbe a toda la población rural.
La vida del campesino debe experimentar un cambio hacia el progreso y bienestar en un futuro no muy lejano; para ello el Gobierno desarrollará los núcleos de gran concentración, a fin de dotarlos dela necesaria infraestructura de los servicios sociales más esenciales.
Las vías de comunicación son importantes para garantizar y asegurar las actividades económicas de todo el País. En este sentido, la inversión estatal se acentuará más en la infraestructura de carreteras.
El sector de la pesca, como uno de los recursos más abundantes y ricos de Guinea Ecuatorial, debe explotarse con todo rigor; para ello invitamos a los países con la tecnología avanzada para que se asocien a Guinea Ecuatorial.
El Gobierno prestará una atención especial en el fomento de la creación de pequeñas y medianas industrias, para la transformación de la producción nacional y el abastecimiento a la población. Para ello se dará apoyo a las empresas nacionales y extranjeras para obtener las condiciones favorables para la ejecución de sus proyectos.
Como cuestión prioritaria para el desarrollo nacional, el Gobierno priorizará el suministro con garantía a todo el País de la energía, utilizando los importantes recursos hidráulicos existentes. Invitamos, para ello, a los países que disponen de una tecnología avanzada para que cooperen con la República de Guinea Ecuatorial.
Estimados Jefes de Estado y de Gobierno,
Queridos Compatriotas:
Actualmente, todos los países del mundo movilizan sus recursos para integrar sus economías a un único modelo universal. A pesar de ser una exigencia necesaria, comprendemos que en las actuales circunstancias de falta de tecnología y recursos humanos profesionalmente cualificados, tal pretensión no solo es difícil para los Países en desarrollo, sino que causará, además, efectos negativos a la larga, por lo que apelamos a la cooperación internacional, para que secunde nuestros esfuerzos en las reformas económicas que emprenda el Gobierno.
Estimados Jefes de Estado,
Excelencias,
Señoras y Señores:
Nuestra máxima aspiración como Estado, sujeto de Derecho Internacional, es saber que el impacto de nuestra política nacional repercute en la disminución de los focos de tensión en las relaciones internacionales, promueve la amista y en entendimiento entre los Pueblos y favorece una cooperación de mutuo beneficio y respeto recíproco entre los Estados, así como la promoción y protección de los derechos políticos, económicos, sociales y culturales de los países más débiles.
Para ello, defendemos y defenderemos como principios políticos no negociables el respeto a la independencia y soberanía estatal, la no ingerencia en asuntos internos de otros Estados y el mantenimiento de relaciones de cooperación equitativas y de beneficio recíproco entre Estados.
Estamos muy preocupados por la proliferación de conflictos y situaciones de inestabilidad en varias partes del mundo, especialmente en nuestra sub-región de África Central.
Lanzamos un llamamiento de paz a las partes involucradas para que abandonen los egoísmos y asuman la responsabilidad de salvaguardar la vida inocente de sus Pueblos.
Felicitamos, en este sentido, los esfuerzos emprendidos por los grupos políticos de Angola, para una reconciliación nacional, tras una guerra de exterminio de casi siete años.
Este ejemplo de Angola debe ser seguido por otros países africanos en conflictos y donde quiera que haya la guerra, a fin de que se restablezca la paz en estos países, y emprender la difícil tarea de la reconstrucción nacional que debe recibir el apoyo de la Comunidad Internacional.
Guinea Ecuatorial se opone y rechaza rotundamente toda acción de terrorismo, sea nacional o internacional, por estar contra la libertad de los Pueblos y el ejercicio dela democracia.
La violencia siempre engendra la violencia, por ello, la guerra debe evitarse a toda costa y reemplazarse por el diálogo para la solución de controversias, sean de cualquier origen y circunstancias.
La Comunidad Internacional debe solidarizarse en materia de la paz. No hay paz internacional mientras un País esté en guerra contra sí mismo o contra otro. En este sentido, todos debemos acudir en socorro a cualquier País que sufre la guerra.
Particularmente, Guinea Ecuatorial se preocupa por evitar cualquier acto que incite la violencia interna y en sus relaciones con otros países. Pro esta razón, privilegiamos las relaciones con los países vecinos, para que sean siempre de amistad, hermandad, cooperación, transparentes, equitativas y de mutuo respeto.
Quiero concluir, queridos Hermanos, que nos habéis honrado con vuestra presencia y, estimados Compatriotas, señalando que la tarea de gobernar no es fácil y no se puede llevar por una sola persona, por lo que pido la colaboración de todos mis Compatriotas y de todos los dirigentes africanos y de los países amigos, para que apoyen solidariamente el proceso político de Guinea Ecuatorial a su desarrollo integral.
¡Arriba la República de Guinea Ecuatorial!.¨
Malabo, 23 de enero de 2003.-
LA OFICINA NACIONAL DEL PDGE.
Fuente: OFICINA NACIONAL DEL PDGE