Es motivo de alegria y satisfacción la implicación que anuncian los jóvenes guineoecuatorianos en el tema de su país.

Como herederos de este país esa toma de conciencia es importante y merece nuestras felicitaciones. Nosotros también comprendimos en su día que los jóvenes no deberían estar al margen de los problemas de su país ni mucho menos excluidos en su debate razón por la que hoy en día seguimos en la lucha para que nuestros hijos tomen el relevo.

Yo personalmente entré en política activa en 1977 a la edad de 23 años afiliándome al primer Movimiento Político de la Oposición de Guinea Ecuatorial en pleno apogeo del régimen sanguinario de Macías y sigo hasta la fecha a pesar de las traiciones sufridas por parte de los que parecía ser luchaban por los mismos objetivos.

Hijos míos, la lucha política nunca ha sido fácil y los que estamos embarcados en este asunto sabemos de qué hablamos. Lo más importante en la lucha política es ser una persona de principios y de convicciones inamovibles. La política se hace con convicción y NO por conveniencia o por un interés puntual. Tampoco se hace la política para matar el aburrimiento.

La lucha política es algo mucho más serio de lo que muchos imaginan precisamente por eso es muy fácil escuchar ciertos reproches a la oposición o a los opositores que no hacen nada. Desde las gradas todo parece muy simple pero ya en el terreno de juego es cuando se constata lo difícil que es todo lo que desde las gradas apreciamos como pan comido. La cuestión que se plantea hoy en día es NO excluir a nadie en esa difícil empresa sino arrimar el hombro y hablar con una sola voz a fin de que nos puedan tomar en serio. La euforia es un mal consejero.

Debemos primero organizarnos porque sin organización todo lo que se quiera hacer ira al traste. Cuando hay orden todo marcha automáticamente pero en el desorden y confusión no haremos que el ridículo y el hazmereir de todos. El momento es crucial para organizarse: jovenes, adultos, viejos, mujeres, estudiantes, trabajadores, profesionales de todos los sectores y con una sola voz gritar que BASTA YA! Obiang debe irse y cuanto antes mejor. Para que esa salida de Obiang sea posible aquí y ahora, debemos unirnos todos porque como se sabe, LA UNIÓN HACE LA FUERZA.

Tampoco significa que debemos esperar a que todos se unan al Proyecto sino arrancar el tren y los que quieran atraparlo ya vendrán corriendo. Necesitamos gente con ideas, propuestas, solvencia moral, honestas, abnegadas defensores de la causa común. Los cantamañanas no tienen o no deberían tener cabida en esta lucha. ¡Ánimo a todos porque la solución está en nuestras manos!

Dr. Samuel Mba Mombe (Médico)

Fuente: LD

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